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Ciudad del Vaticano (Martes, 20-05-2014, Gaudium Press) Cerca de 100 obispos de México fueron recibidos por el Papa Francisco en la mañana de este lunes 19, en el Vaticano. En la ocasión, el representante de los prelados fue el Presidente de la Conferencia Episcopal y Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles.
El Pontífice dirigió al grupo un discurso, demostrando conocer bien la realidad del país y su historia. Después, él alentó a los obispos mexicanos a promover el espíritu de concordia entre los jóvenes por medio de la cultura del encuentro, del diálogo y de la paz.
De acuerdo con el Papa, «a los pastores no cabe aportar soluciones técnicas o adoptar medidas políticas», pues «la fidelidad a Jesús solo puede ser vivida con solidaridad comprometida y próxima del pueblo».
Después, resaltó que la vocación de los laicos en el país «es específicamente la de transformar el mundo según Cristo: con la fuerza de la Palabra de Dios, de los sacramentos y de la oración, vivir la Fe en el corazón de la familia, la escuela, la empresa, dando testimonio de la alegría del Evangelio».
El Santo Padre destacó también el potencial de la piedad popular y de la familia, siendo ésta, según él, un medio privilegiado para que «el tesoro de la Fe pase de padres a hijos». En seguida, dio énfasis a la importancia de las parroquias, «ámbito eclesial que asegura el anuncio del Evangelio, la caridad generosa y la celebración litúrgica».
Todavía según el Pontífice, los sacerdotes son los primeros y más preciosos colaboradores para llevar Dios a los hombres y los hombres a Dios y solicitó a los obispos mexicanos que no se olviden de tener siempre un encuentro personal con cada uno de ellos, interesándose por la situación y alentándolos a los trabajos pastorales.
El Papa Francisco se refirió también a las jóvenes vocaciones, pidiendo atención especial a su promoción, selección y formación.
Finalizando el encuentro, el Santo Padre recordó el 7º aniversario de las indicaciones de la Conferencia de Aparecida, reforzando la importancia de la Misión Continental permanente.
Como en todos los encuentros, el Papa se despidió de los obispos mexicanos pidiendo que recomienden a sus fieles que recen por él y que Nuestra Señora de Guadalupe los guíe y oriente. (LMI)
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