miércoles, 24 de abril de 2024
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Una sorpresa para las monjas del monasterio sevillano de San Leandro

Sevilla (Martes, 19-08-2014, Gaudium Press) Están dedicadas al servicio de la Iglesia en la oración, también se dedican a las labores de costura y les encanta elaborar dulces, una actividad que les ayuda, en alguna medida, al sostenimiento de su monasterio; pero las más chichas en su tiempo libre realizan una actividad que ha fortalecido el compañerismo, la integración y ha transmitido alegría: el baloncesto.

La mayoría de hermanas vienen de África y están acostumbradas a moverse mucho. El baloncesto ha transmitido alegría entre las monjitas / Foto: La Feb.

Se trata de las 24 monjas del monasterio sevillano de San Leandro, un convento de clausura con varios siglos de historia, que hace poco, con motivo de la copa de mundo de baloncesto que ocurrirá en Sevilla en los próximos días, fue noticia en algunos medios de comunicación, no por los deliciosos dulces conventuales -ya famosos en la ciudad española-, sino por una sorpresa que recibieron para su convento.

Según narró el Diario de Navarra, recientemente el monasterio atravesó por una difícil situación económica, que logró superarse gracias a un acuerdo que firmó el convento con el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, quien a principios de junio visitó el lugar y no le fue inadvertido ver a varias monjitas jugando el baloncesto con una canasta rota y un balón pinchado.

El alcalde al ver ello decidió hacer realidad el sueño de las religiosas y darles una sorpresa con una mejor canasta y nuevos balones. «Es una idea maravillosa ver la ilusión que les ha hecho», comentó José Luis Sáenz, quien colaboró para que esta idea se hiciese realidad, y quien fue citado por el medio de comunicación español.

Una iniciativa positiva y que agradece la Madre Superiora del Convento, Sor Natividad: «Les puse la canasta hace 14 años. Aquí llevamos una vida muy sedentaria y un poco de ejercicio es muy positivo. Además. Muchas de las monjas vienen de África y allí están acostumbradas a moverse mucho», citó el Diario de Navarra.

 

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