jueves, 28 de marzo de 2024
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Cardenal filipino bendice labor de hogar para ancianos abandonados y a sus benefactores

Ciudad San Pedro (Lunes, 29-09-2014, Gaudium Press) En una emotiva Eucaristía con motivo del aniversario de una institución católica que sirve a los ancianos abandonados en Filipinas, el Cardenal Luis Antonio Tagle, Arzobispo de Manila, explicó el significado de la Iglesia y bendijo su nueva capilla, a los ancianos y sus benefactores. El purpurado compartió con miembros y amigos del Hogar María Madre de la Misericordia, entre quienes se encontraban sacerdotes, religiosas, los miembros de la junta directiva, donantes y líderes civiles. La Eucaristía fue concelebrada por el Obispo de Laguna, Mons. Buenaventura M. Famadico, y el Obispo de Imus, Mons. Reynaldo G. Evangelista.

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El Cardenal Luis Antonio Tagle bendijo la nueva capilla del Hogar y celebró sus 20 años de servicio a los ancianos abandonados. Foto: CBCP News.

A lo largo de sus 20 años de existencia, el hogar ha servido a más de 400 ancianos abandonados, sostenidos a través de donativos de los fieles católicos. «Dios es quien provee el Hogar», afirmó a CBCP News la Dra. Mercedes «Ched» M. Oliver, donante principal de la institución. «Antes de que pidamos ayuda, ésta llega en el momento en que es necesaria».

La institución no sólo ha proporcionado ayuda material a los ancianos abandonados, sino que también fomenta activamente su asistencia espiritual. «Quienes se han quedado con nosotros han recibido ayuda espiritual con el apoyo de los sacerdotes y materiales de apoyo de las religiosas (Hermanas Misioneras de San Francisco Javier) de Mayanmar», agregó Oliver. De hecho, en la Eucaristía presidida por el Card. Tagle, estuvieron presentes 17 sacerdotes relacionados con la obra.

Una de los aspectos inevitables del apostolado con los ancianos es su debida preparación para la muerte y la asistencia cristiana en ese momento. El apoyo físico y espiritual se extiende después de su partida, ya que el Hogar provee los servicios religiosos y una sepultura cristiana apropiada en un parque memorial privado, propiedad de la Dra. Oliver. Ella misma consigue nuevos donantes y colaboradores, a quienes promete las recompensas divinas a la caridad cristiana. «No duden en ayudar a la fundación de forma que ustedes puedan compartir las bendiciones que recibimos al cuidar a los ancianos abandonados», invitó.

Con información de CBCP News.

 

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