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Jerusalén (Miércoles, 30-09-2015, Gaudium Press) «Por la gracia de Dios y después de largas negociaciones», según describió la Secretaría de Escuelas Cristianas, las instituciones educativas llegaron a un acuerdo con el Ministerio de Educación de Israel que permitió poner fin a la suspensión de las clases desde el 28 de septiembre. El grave recorte presupuestal para las instituciones católicas afectó a más de 33 mil estudiantes durante un mes.
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| Anuncio del acuerdo por parte de la Oficina de las Escuelas Cristianas de Israel. Foto: Patriarcado Latino de Jerusalén. |
Los acuerdos a los que se llegó determinan que el Tesoro de Israel realice un aporte por una sola vez de 50 millones de Shekels a las escuelas cristianas durante el año lectivo, y que los profesores de estas instituciones sean incluidos en los programas de desarrollo profesional diseñados por el ministerio, a los cuales no tenían acceso. Además de esto, los estudiantes católicos también podrán acceder a las horas de fortalecimiento para diferentes materias.
Finalmente, las partes acordaron conformar una comisión para discutir el estatus legal de las escuelas cristianas en Israel, el cual es el problema de fondo que suscitó el recorte presupuestal. Las escuelas recibirán los pagos mensuales por parte del Ministerio, lo que permitirá reducir en un 25% el costo de la mensualidad de los estudiantes de primaria. Si bien los estudiantes perdieron un mes de clases, las diferentes festividades locales y actividades programadas hacen que en la práctica los días perdidos sean 15, los cuales serán recuperados durante el año.
Durante muchos años, las escuelas privadas cristianas, algunas habitaciones adosadas a los templos, fueron un oasis en medio del extendido analfabetismo de la región. Los acuerdos con el imperio otomano permitieron a los religiosos establecer escuelas, hospitales y orfanatos, lo que permitió el florecimiento cultural de la sociedad palestina. Las escuelas cristianas fueron creadas para ofrecer educación católica a los fieles, pero se abrían a los no creyentes que se beneficiaron de su alta calidad y sus principios cristianos. Después de la creación del estado de Israel en 1948 se crearon disposiciones diferenciadas para las escuelas cristianas, lo que significó una brecha cada vez más amplia en las ayudas recibidas por las instituciones, la cual debía ser suplida por los padres de familia.
Con información de Patriarcado Latino de Jerusalén.
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