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Ciudad de México (Lunes, 05-10-2015, Gaudium Press) Un sacerdote exorcista avanza hacia los altares. Se trata del ahora Venerable Juan Manuel Martín del Campo, un sacerdote mexicano nacido en 1917 y fallecido en 1996, a quien se reconocieron sus virtudes heroicas por parte de la Congregación para las Causas de los Santos en su más reciente decreto, que determina avances en las causas de ocho Siervos de Dios.
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| Venerable Juan Manuel Martín del Campo. |
El testimonio de vida del Venerable Martín del Campo incluyó el padecimiento de la persecución religiosa en México en la década de 1930 y la peculiaridad más notoria de su apostolado es el ejercicio del ministerio del exorcismo en la Diócesis de Xalapa en los últimos años de su vida (1987-1995).
Fue criado en una familia practicante que rezaba el Santo Rosario diariamente junto al sacerdote local y sin falta recibía la bendición de su madre antes de ir a dormir. Otro de sus hermanos también se hizo sacerdote. Durante sus años de Seminario, tuvo que enfrentar la expropiación de los bienes de la Iglesia y la negación de varios derechos civiles a los sacerdotes. Sin embargo, se destacó por ser un estudiante ejemplar y ser guiado personalmente por San Rafael Guizar y Valencia, Obispo canonizado por Benedicto XVI.
Como sacerdote se hizo formador de las nuevas vocaciones y llegó a ser director y prefecto de teólogos hasta 1947, vicario de religiosos hasta 1954 y luego director diocesano de Propaganda Fide. Sirvió 10 años como párroco en San Jerónimo en Coatepec y Canónico penitenciario en la Catedral de Xalapa durante 15 años, tras los cuales fue designado como exorcista, cargo que desempeñó hasta un año antes de morir. Falleció el 13 de agosto de 1996 y sus restos se conservan en la Capilla de Francisco de Asís en la iglesia de San Jerónimo de Coatepec.
Con información de National Catholic Register.
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