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Madrid (Martes, 06-10-2015, Gaudium Press) El próximo 18 de octubre el Santo Padre Francisco canonizará en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, a la beata Madre María Purísima de la Cruz, sexta madre general de la Compañía de la Cruz, fundada en la ciudad de Sevilla por Santa Ángela de la Cruz.
Con ocasión de este acontecimiento, la Archidiócesis de Madrid está organizando una peregrinación a Roma para que los fieles españoles celebren junto al Pontífice la canonización de la religiosa nacida en la capital española.
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De acuerdo con el programa previsto, la peregrinación comenzará el jueves 15 de noviembre cando el Arzobispo de Madrid, Mons. Carlos Osoro, presida al mediodía, y en la Catedral de la Almudena, una solemne Misa de Acción de Gracias por la canonización de la religiosa.
El 17 de octubre, ya en la Ciudad Eterna, se celebrará la Misa del Peregrino. La solemnidad ocurrirá a las 18:30 horas en la «Chiesa Nuova», parroquia de las Hermanas de la Cruz. Ya para el domingo 18 los peregrinos se dirigirán a la Plaza de San Pedro en el Vaticano para participar de la ceremonia de Canonización que presidirá el Sumo Pontífice a partir de las 10:00 horas.
La peregrinación culminará con una Misa de Acción de Gracias que se celebrará el lunes 19 a las 16:00 horas en la Basílica de Santa María La Mayor.
Un libro sobre la futura santa
En unión con los actos conmemorativos con ocasión de la Canonización de la Madre de la Purísima, este viernes 9 de octubre se presentará en Madrid el Libro «Santa María de la Purísima» de autoría del Padre Teodoro León, Vicepostulador de la Causa de Canonización, y Olga Salvat, sobrina de la futura santa.
El libro será presentado a las 19:00 horas en el salón de actos Juan Pablo II de la Basílica de la Concepción de Nuestra Señora, lugar donde fue bautizada la religiosa madrileña.
De Madrid a Sevilla
La Madre María de la Purísima de la Cruz nació en Madrid el 20 de febrero de 1926. Cuando tenía 18 años ingresó en la Compañía de la Cruz, fundada en Sevilla en 1875 por Sor Ángela de la Cruz. Tomó los hábitos en 1945, profesando temporalmente en 1947, y realizando sus votos perpetuos en 1952.
Gracias a que mantuvo intacto el carisma fundacional de la Compañía, la religiosa fue elegida Madre General de la misma el 11 de febrero de 1977, siendo antes superiora de dos de las casas de la congregación, además de maestra de novicias y consejera generalicia.
Su labor se centró en ayudar a quienes más necesitaban, especialmente a las niñas de los internados, así como a los ancianos, enfermos y pobres. «De lo poco, poco», solía ser su lema y la manera cómo vivió el carisma de la obra a la que perteneció.
Falleció el 31 de octubre de 1998, siendo beatificada el 18 de septiembre de 2010 durante el Pontificado del Papa Benedicto XVI y en una numerosa ceremonia en el Estadio Olímpico de La Cartuja, en Sevilla. Su cuerpo permanece en una urna al interior de la Capilla de las Casa Madre de las Hermanas de la Cruz, de la ciudad andaluza.
Con información de la Archidiócesis de Sevilla.
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