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Le Puy-en-Velay (Sábado, 26-03-2016, Gaudium Press) La Iglesia en Francia celebra el Gran Jubileo de la Nuestra Señora de Puy-en-Velay, un acontecimiento «raro e irregular» según descripción del propio Santuario, ya que sólo se concede cuando la fiesta de la Anunciación y el Viernes Santo coinciden. El Jubileo se extenderá hasta el 15 de agosto y se repetirá en el año 2157.Según informó el Santuario, durante estos meses los fieles católicos se congregarán para «una peregrinación de Expiación», que incluye «celebraciones litúrgicas, procesiones y tiempos de meditación».
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| Catedral de Le Puy en Velay, Francia. Foto: Jean-Pol Grandmont |
Durante el último Jubileo, ocurrido en 2005, el Santuario calculó en 250 mil el número de peregrinos recibidos. El Santuario ha sido reconocido durante siglos como uno de los puntos de inicio de la peregrinación a Santiago de Compostela en España y fue uno de los lugares de peregrinación más importantes de Francia durante la Edad Media, su edificación es atribuida a un milagro en el cual nevó en el lugar de la construcción en pleno mes de julio y las marcas de pisadas de ciervo en la nieve señalaron los cimientos del tiempo a la vez que una visión del Obispo le mostró la gloria futura del Santuario de dedicado a la Santísima Virgen.
Además de la coincidencia de las fiestas religiosas que posibilitan el Jubileo, el Santuario destacó la relación de los Grandes Días de Expiación del Santuario con el Jubileo de la Misericordia, por cuanto el hecho es una oportunidad única de obtener la Misericordia de Dios y la reconciliación con los hermanos.
La tradición de varios Padres de la Iglesia, además de la piedad popular de los primeros siglos de cristianismo ubica el 25 de marzo como la fecha de la Anunciación (inicio de la vida terrena de Jesucristo en el vientre de la Santísima Virgen) y la fecha del Viernes Santo, cuando dio su vida en la Cruz. De esta manera, las fechas tendrían el valioso significado de la plenitud cíclica de la vida de Cristo entre los hombres que culminaría en un sepulcro nunca antes usado, símbolo del vientre virginal de la Santísima Virgen María. La conjunción de los calendarios solar y lunar que hace posible la coincidencia también expresa el poder de Dios sobre los astros del cielo y el paso del brillo del sol, Jesucristo, al tiempo en que su gracia desciende a través de la Iglesia, la cual, como la luna, refleja el esplendor divino.
Con información de Independent Catholic News y A Clerk of Oxford.
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