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Buenos Aires (Martes, 31-10-2017, Gaudium Press) Con el objeto de promover la devoción a la Divina Misericordia, recientemente fue publicado el libro «La Divina Misericordia prepara al mundo», de autoría del Padre Mauro Carlorosi, sacerdote argentino del Oratorio de San Felipe Neri, quien presenta una aproximación al Diario de Santa Faustina Kowalska, conocida como «Apóstol de la Misericordia», y al mensaje de Dios sobre la Misericordia Divina; todo con el objeto de animar su culto.
El autor hace referencia en la obra a cinco pautas, concretas y para llevar a la práctica, que el mismo Jesús muestra con la Divina Misericordia. La primera habla de la veneración de la Imagen de Jesús Misericordioso, como indicó Nuestro Señor a Santa Faustina, según narró la religiosa en su diario: «Ofrezco a los hombres un recipiente con el que han de venir a la Fuente de la Misericordia para recoger gracias. Ese recipiente es esta imagen con la firma: Jesús, en Ti confío» (D. 327).
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| El Padre Carlorosi, autor del libro, lleva más de 15 años animando retiros espirituales que se centran en la devoción a la Divina Misercordia / Foto: preparaalmundo.com. |
La segunda pauta es la Fiesta de la Divina Misericordia. Sor Faustina escribe en el diario que ésta ha de celebrarse el primer Domingo después de la Pascua de Resurrección: «Este día están abiertas las entraña de Mis misericordia. Derramo todo un mar de gracias sobre las alamas que se acercan al manantial de Mi misericordia» (D. 699).
La Coronilla de la Divina Misericordia es la tercera pauta a la que hace referencia el Padre Carlorosi en el libro, tomando lo escrito por la santa polaca por revelación de Nuestro Señor: «qué gracias más grandes concederé a las almas que recen esta coronilla; las entrañas de Mi misericordia se enternecen por quienes rezan esta coronilla» (D. 848).
Para la cuarta, el sacerdote profundiza en la Hora de la Divina Misericordia: «A las tres, ruega por Mi misericordia, en especial para los pecadores y aunque sólo sea por un brevísimo momento, sumérgete en Mi Pasión, especialmente en Mi abandono en el momento de Mi agonía. Ésta es la hora de la gran misericordia para el mundo entero. Te permitiré penetrar en Mi tristeza mortal. En esta hora nada le será negado al alma que lo pida por los méritos de Mi Pasión» (D. 1320).
La última pauta de la que habla el sacerdote es sobre la Difusión de la Divina Misericordia, recordando lo dicho por Santa Faustina en el diario: «A las almas que propagan la devoción a Mi misericordia, las protejo durante toda su vida como una madre cariñosa protege a su niño recién nacido y a la hora de la muerte no seré para ellas Juez sino Salvador misericordioso» (D. 1075).
El libro consta de 20 capítulos, distribuidos en cuatro partes: el culto a la Divina Misericordia, donde el autor profundiza en lo esencial del mensaje, en la misión de Santa Faustina, su culto a lo largo de la historia, San Juan Pablo II y la difusión a esta devoción, su semejanza con la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, etc.
En la segunda parte el Padre Carlorosi indica cómo dar culto a la Divina Misericordia; en la tercera ofrece un camino de vida espiritual tomando a Dios misericordioso, el Amor de Dios y a la Virgen María como Madre de Misericordia. Y en la cuarta, el autor propone cómo la Divina Misericordia prepara al mundo.
El prólogo está firmado por Mons. Luis Urbanc, Obispo de Catamarca, quien señala que «particularmente me hizo mucho bien leer y releer los textos transmitidos por Santa Faustina». También dice que «los tiempos que vivimos tienen mucha sed de misericordia».
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Con información de preparaalmundo.com y Religión en Libertad.
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