viernes, 29 de marzo de 2024
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Diócesis de Knoxville abre causa de Beatificación del P. Patrick J. Ryan

Knoxville (Sábado, 24-09-2016, Gaudium Press) El Obispo de Knoxville, Mons. Rick Sticka, realizó la apertura formal de la causa de Beatificación del sacerdote P. Patrick J. Ryan, presbítero que falleció a los 33 años de edad mientras servía a los enfermos afectados por una epidemia. El P. Ryan ejecutó una incansable labor misionera y renunció a huir de un brote de malaria que finalmente cobró su vida.

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Estampa de oración con una reliquia empleada para pedir favores por intercesión del ahora Siervo de Dios P. patrick Ryan. Foto: Diócesis de Knoxville.

El sacerdote nació en Irlanda en 1845, pero su familia se vio obligada a emigrar a Estados Unidos, donde Ryan se ordenó sacerdote. En los primeros años de su ministerio fue enviado a varias misiones y en 1872 fue destinado a Chattanooga, una población de extraordinario crecimiento demográfico. El presbítero amplió el templo parroquial, construyó una escuela y atendió a la dispersa población católica en cinco templos de misión a través de caminos accidentados.

Cuando un médico reportó un caso de malaria, enfermedad que los pobladores locales creían tener aislada por las montañas que rodeaban la población, se desató una oleada de pánico que ocasionó la huida de la mayoría de la población. El P. Ryan renunció a separarse de los fieles y se dedicó con intensidad al servicio de los más necesitados, visitando los hogares en las zonas de mayor infección. Para el momento que la enfermedad atacó al sacerdote, acabó con su vida en sólo 48 horas y los pobladores lo reconocieron como un héroe. Ocho años después de la epidemia, su cuerpo fue trasladado a un nuevo cementerio y los pobladores formaron una caravana de más de 100 carruajes en su honor.

«He aquí un sacerdote que pudo fácilmente huir de la ciudad, o estar lejos de las áreas que fueron afectadas con los embates de la fiebre amarilla», comentó el Rector de la basílica de San Pedro y San Pablo, donde sirvió el sacerdote. «Pero siguiendo un impulso de gran caridad, el P. Ryan fue a estos lugares y ejerció su ministerio con las personas que contrajeron la enfermedad y murió a causa de ella mientras sirvió a su pueblo en una forma muy heroica».

Con información de National Catholic Register y Diócesis de Knoxville.

 

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