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Salvador – Bahía (Martes, 25-10-2016, Gaudium Press) En Bahía, Brasil, los fieles católicos celebraron el sábado 22 de octubre la inauguración del Centro Hermana Dulce, de la Parroquia Nuestra Señora de los Alagados y San Juan Pablo II.
La ceremonia solemne de inauguración tuvo inicio a las 17:00 horas, cuando el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Salvador, Mons. Gilson Andrade da Silva, concedió la bendición al espacio.
Luego, los fieles participaron de una procesión con destino a la Matriz, donde Mons. Gilson a las 19:00 horas presidió una Misa en acción de gracias por la fiesta del co-patrono, San Juan Pablo II.
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Un espacio dedicado a la oración y a la prestación de servicios
La unidad dedicará su espacio a la oración y la prestación de servicios en beneficio de las personas más carentes, trayendo como inspiración la trayectoria del Ángel Bueno de la Bahía, que desde la década de 1930 acogía a pobres y enfermos en el barrio de Alagados, revelando desde temprano su solidaridad, intrepidez y sentido de justicia.
«Fueron muchos años de lucha hasta conseguir concretar ese sueño. Ahora, tendremos la oportunidad de ampliar el trabajo social que desarrollamos. Vamos, humildemente, a dar continuidad al legado de caridad iniciado en el barrio por la Bienaventurada Dulce de los Pobres», explicó el Padre Etienne Kern, párroco de Nuestra Señora de los Alagados y San Juan Pablo II.
Los servicios que se ofrecerán incluirán la distribución de sopa hasta el acompañamiento para jóvenes embarazadas, catequesis para niños y orientaciones en el área de la Salud.
Además de eso, las Obras Sociales Hermana Dulce (OSID) también marcará presencia brindando atención a la nueva casa.
Entre las acciones habrá actividades de promoción a la salud y prevención de enfermedades; incentivo al arte, cultura y educación, además de un trabajo de reducción de riesgos y daños junto a los usuarios de substancias psicoactivas, iniciativas que se realizarán a través de los profesionales del Centro de Convivencia Hermana Dulce de los Pobres.
El proyecto
Idealizado en 2008 por el Padre Bernard Charil, antiguo párroco de la comunidad de Uruguay, el Centro Hermana Dulce es considerado el resultado de la dedicación y empeño de los miembros de la localidad que, incluso en medio a las dificultades, no desanimaron y persistieron hasta que el proyecto se hiciera realidad.
Con el apoyo del Padre Etienne, realizaron bazares y fiestas benéficas a fin de recaudar recursos para la construcción de la unidad. (LMI)
De la redacción Gaudium Press, con informaciones Arquidiócesis de Salvador.
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