viernes, 29 de marzo de 2024
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Escuela católica en Spokane, Estados Unidos, reforma su currículo y adopta un programa clásico

La oferta de un programa clásico ha tenido buenos resultados para las escuelas católicas.

Programa Clásico Escuela Católica San Carlos en Spokane Gaudium Press

Escuela Católica San Carlos en Spokane, Washington. Foto: St. Charles Catholic School.

Spokane (06/06/2020 22:50:20, Gaudium Press) Tras varios cambios de directivos en los últimos años, la Escuela Católica San Carlos en Spokane, Washington, anunció la adopción de un nuevo modelo educativo. La institución ofrecerá un programa clásico, lo cual hace parte de un tendencia que ha tenido efectos positivos en otras escuelas católicas en el país.

«Al hacer nuestra investigación, descubrimos que es una idea que se está extendiendo en todo el país», comentó el P. Esteban Soler, párroco de San Carlos. La adopción del currículo llena un vacío en la ciudad, donde ninguna primaria católica ofrece educación clásica. Otras escuelas que implementaron el cambio registraron un notable aumento en el número de alumnos, lo cual ofrece solidez y sostenibilidad a las instituciones.

Programa clásico para educar en la fe

La educación clásica es para el P. Soler una manera de integrar más eficientemente los contenidos académicos con la transmisión de la fe. «El plan de estudios está orientado a ayudar a los niños a crecer en una base coherente, donde todo se entiende como un todo, antes de que puedan ir a diferentes especificaciones», expuso a The Catholic Telegraph.

Una de las características más llamativas del programa clásico es la enseñanza del latín. A esta base lingüística se suma un fomento de las virtudes cristianas en la comunidad educativa. Según Heather Schlaich, nueva directora de la escuela, el objetivo de la escuela se logra «enseñando latín a los estudiantes, exponiéndolos a literatura de alta calidad y enfocándose en la apreciación de la belleza, la bondad y la verdad».

«Estamos emocionados. Es un desafío, pero en general, creo que será bueno. Creo que atraerá a familias que ahora no reciben servicios de las escuelas católicas», comentó el P. Soler. «La escuela es parte de la vida de la parroquia. La misión de la parroquia, como toda parroquia católica, es evangelizar. Espero que la escuela ayude a llevar a los estudiantes a un conocimiento más profundo de Cristo».

Con información de The Catholic Telegraph.

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