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Ciudad del Vaticano (Lunes, 10-07-2017, Gaudium Press) En el Ángelus de ayer, el Papa comentó el texto del Evangelio de San Mateo del día, en el cuál el Señor invita a todos a ir a Él, sobre todo a los cansados y oprimidos, a quienes dará descanso.
El Pontífice alertó contra aquellos que «prometen restaurar y distraen solo un poco, aseguran la paz y dan diversión, dejando después en la soledad de antes, son ‘fuego de artificio’. Por esto Jesús indica donde andar: ‘Venid a mí’ «.
Es preciso «no olvidar de abrirse a Él y contarle la vida, encomendar las personas y las situaciones. Tal vez hay ‘zonas’ de nuestra vida que nunca le hayamos abierto y que permanecen oscuras, porque no han nunca visto la luz de Señor. Cada uno de nosotros tiene su propia historia. Y si alguno tiene esta zona oscura, que busque a Jesús, vaya a un misionero de la misericordia, vaya donde un sacerdote, vaya… Pero vaya a Jesús, y cuente esto a Jesús. Hoy Él dice a cada uno: ‘Coraje, no rendirse bajo los pesos de la vida, no cerrarse frente a los miedos y los pecados, sino venid a Mí'».
Cuando estamos con problemas vemos todo negro y tendemos a encerrarnos en pensamientos tristes, dijo el Papa. Entretanto, el Señor «quiere tirarnos fuera de esas ‘arenas movedizas’ y por esto dice a cada uno: ‘¡Venid!’ – ‘¿Quién?’ – ‘Tú, tú, tu…’ La vía de salida es en la relación, en el tender la mano y levantar la mirada hacia quien nos ama de verdad».
«Cuando en la vida entra Jesús, llega la paz, aquella que permanece también en medio de las pruebas, en los sufrimientos. Vamos a Jesús, démosle nuestro tiempo, encontrémoslo cada día en la oración, en un diálogo confiante y personal; familiaricémonos con su Palabra, descubramos sin temor su perdón, saciémonos de su Pan de Vida», expresó Francisco.
Con información de Radio Vaticano
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