La vocación del artista es ofrecer belleza, verdad y amor, dice Arzobispo de Singapur

Singapur (Miércoles, 20-03-2019, Gaudium Press) El Arzobispo de Singapur, Mons. William Goh Seng Chye, publicó una carta pastoral en la cual destaca que la vocación del artista es «ofrecer belleza, verdad y amor».

En la Exhortación, dirigida y titulada «A los artistas y promotores de las Artes», el prelado explica que los artistas, «a través de sus obras inspiran a la humanidad a apreciar la belleza de la creación y por tanto conducen a conectarse con lo Sagrado y con la Transcendencia».

La carta es publicada algunos días después de la polémica decisión tomada por el gobierno local de cancelar la presentación de un grupo musical satánico, bajo la justificativa de que se temía que el grupo denigrase las religiones y promoviese la violencia, puntos latentes en sus músicas y exhibiciones. Normalmente los músicos de la referida banda representan ceremonias satánicas, llegando a derramar sangre sobre sus seguidores.

Mons. Goh recuerda el importante papel que los artistas tienen dentro de la sociedad, que, según él, son «llamados a utilizar la propia vocación para el bien común. Desafortunadamente el arte hoy se convirtió en sinónimo de todo aquello que es vanguardia; una licencia para llegar hasta la frontera de la convención; la plataforma para disminuir o provocar, en nombre de la ‘libertad de expresión’, cualquier cosa que no se comparta, como las creencias religiosas y apoyar la filosofía nihilista que es destructiva para el bienestar de la humanidad».

El prelado alertó a los católicos a estar atentos «sobre lo que realmente es arte y lo que es vileza disfrazada de arte». Y agregó que «si por un lado debemos respetar el hecho que las personas tienen gustos y valores diversos, por otro lado tenemos el deber moral de asegurar que las personas de todas las comunidades, religiosas o no, coexistan y vivan en paz y respeto recíproco». Consecuentemente, los gobiernos tienen la obligación de proteger el bien común, garantizando que «las artes promovidas estén al servicio de la verdad, el amor y la unidad».

Concluyendo su mensaje, el Arzobispo de Singapur invitó a «todos los cristianos y personas de buena voluntad a recuperar el verdadero significado de las artes; alentar a todos los artistas a promover las artes que inspiran la paz, el verdadero amor, la belleza y que dan la vida, la alegría y la esperanza a nuestros pueblos». (EPC)