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Belén (Martes, 16-12-2014, Gaudium Press) Faltando poco más de una semana para la celebración de la Fiesta de la Navidad, el Patriarcado Latino de Jerusalén compartió una descripción de la tradicional celebración en Belén, el lugar mismo en el cual nació Jesucristo hace más de 2000 años. Una de las costumbres que identifican la celebración en este lugar es la Entrada Solemne del Patriarca Latino de Jerusalén en Belén, que se realizará el día de la víspera de la Fiesta, 24 de diciembre, y constituye un recorrido cargado de significado.
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| El Patriarca Latino de Jerusalén, Mons. Fouad Twal, as u llegada a Belén en 2011. Foto: Mounir Hodaly / LPJ. |
El solemne recorrido se inicia a la 1 pm, cuando el Patriarca Fouad Twal descenderá por las escaleras del Patriarcado e ingresará a un vehículo que lo llevará por las calles, cerradas por la Policía de Israel y con todos los semáforos puestos en luz verde, y que pasará por la Puerta de Jaffa. La comitiva se dirige entonces al Monasterio Mar Elías, el cual se encuentra en el límite del distrito de Belén. En este lugar las autoridades civiles y religiosas de Belén aguardan al Patriarca, y se unen a su recorrido por el camino antiguo de los Patriarcas, ruta empleada por Abraham, Isaac y Jacob.
El siguiente destino de la comitiva es la Tumba de Raquel, histórico lugar donde el Patriarca se encuentra con el clero de Belén. El Patriarca cruza el muro de separación en una entrada no habitual creada para eventos especiales y en este lugar la escolta de cinco hombres de caballería israelíes cambia a cinco hombres de caballería palestinos, con las autoridades de Belén abriendo el camino hasta la plaza Manger en el centro de Belén. En este lugar aguardan los fieles, congregados en número considerable y presididos por el Guardián Franciscano.
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| Su Beatitud Fouad Twal ante el lugar del nacimiento de Jesús en la Navidad de 2013. Foto: Andrea Krogmann / LPJ. |
Mientras los fieles aguardan al Patriarca se mantiene un ambiente festivo, ya que el recorrido solemne de diez kilómetros toma unas dos horas de duración. El momento culmen ocurre a la llegada del Patriarca, quien abre la llamada Puerta de la Humildad en medio de los vítores de los presentes. El Patriarca, recibido por el Guardia? procede entonces a encabezar el rezo de las Vísperas, primera celebración del ritual de navidad, presidiendo la procesión hacia la gruta, la misma que se realiza diariamente a las cuatro de la tarde pero que en la Fiesta se reviste de una mayor solemnidad y alegría.
Terminado el rezo litúrgico de Vísperas, el Patriarca se retira a esperar privadamente la hora de la Eucaristía de Media Noche, marcando la espera del mundo entero de la conmemoración del nacimiento del Salvador y su segunda venida en la plenitud de los tiempos. Para el Patriarcado Latino de Jerusalén, esta fiesta local de particular importancia tiene un sentido universal, ya que «cuando cada cristiano en su propia Iglesia (…), con su familia, celebra la Navidad, lo hace con la fuerza de una oración vinculada a Belén. Entonces podemos entender por qué es importante que el representante de la Iglesia Católica llegue a este pequeño pueblo de Judea donde todo comenzó, al son de clarines y trompetas».
Con información de Patriarcado Latino de Jerusalén.
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