martes, 16 de abril de 2024
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Dios siempre dona con generosidad su gracia a los hombres, expresó el Papa

Ciudad del Vaticano (Martes, 20-10-2015, Gaudium Press) En la homilía en la Casa Santa Marta, el Papa afirmó que Dios siempre dona con generosidad su gracia a los hombres, los cuales tienen el hábito de «medir las situaciones», y explicó que entender la abundancia del amor divino es fruto de una gracia.

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La palabra abundante es aplicada al amor que Dios tiene por todos los hombres, que con frecuencia se acostumbran a dar migajas cuando deciden donar algo. En eso, el Santo Padre hizo la lectura de un trecho de la Carta de San Pablo, donde hablaba de la salvación traída por Jesús, que supera la caída de Adán, siendo esta una demostración de la donación con abundancia, que luego resulta en la salvación, «la amistad entre nosotros y Él».

«¿Cómo Dios da, en el caso de la amistad, nuestra salvación? Da como dice que nos dará a nosotros cuando hacemos una buena acción: nos dará una medida buena, llena, desbordante (…) pero esto hace pensar en la abundancia y esta palabra es repetida tres veces en este trecho. Dios da en la abundancia hasta el punto de decir a Pablo: ‘donde vivía el pecado, sobreabundó la gracia’. Este es el amor de Dios: sin medida».

Según el Pontífice, «Dios no es mezquino: El no conoce la mezquindad. El da todo. Dios no se queda parado: Él mira y espera que nosotros nos convirtamos. Dios es un Dios que sale a buscar, nos busca a cada uno de nosotros. Todos los días Él nos busca, está buscándonos. Como ya hizo y ya dijo, en la Parábola de la oveja perdida o de la dracma perdida: busca. Es siempre así».

Conforme el Papa, «se hace más fiesta» por un pecador que se convierte que por cien que permanecen justos, y aún así, con base en nuestros criterios humanos, no es fácil entender el amor de Dios.

«Es verdad, nosotros siempre tenemos la costumbre de medir las situaciones, las cosas, con medidas que poseemos, pero son medidas pequeñas. Por eso, nos haría bien pedir al Espíritu Santo la gracia de aproximarnos por lo menos un poco, para entender este amor y tener ganas de ser abrazados y besados con la medida sin límites», concluyó. (LMI)

 

 

 

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