Primera escuela católica de California removió estatuas religiosas

San Anselmo, California (Jueves 31-08-2017, Gaudium Press) El Colegio secundario San Domenico de carácter privado, la Institución educativa católica más antigua de California, removió las estatuas religiosas en su campus. Algunas han sido donadas mientras otras han sido guardadas en el sótano de la Institución, lo que ha generado fuertes críticas.

Algunos padres de familia han presentado su objeción a la medida, afirmando que al remover las estatuas se elimina una tradición religiosa de 167 años.

Shannon Fitzpatrick, madre de un estudiante en San Domenico, quien recientemente presentó una queja formal sobre la remoción de las estatuas, cuestionó la disposición de la institución a dejar de lado su identidad católica.

Eliminar las estatuas «parece significar abandonar la tradición de 167 años de San Domenico, al tener miedo y vergüenza de celebrar la herencia y las creencias», reportó Fitzpatrick al Catholic Herald. La escuela pertenece a la Orden de las Dominicas de San Rafael.
La Institución Católica alega que tomó esta decisión teniendo en cuenta que no todas las familias se consideran católicas, y por ese motivo buscan una «inclusión». Afirma que ya no ingresaron el número de estudiantes suficientes que se identifiquen con las creencias católicas en los últimos períodos.

Cecily Stock, Directora de la Escuela, declaró a Catholic News Agency: «La remoción de los sacramentos del currículo se debía a la falta de interés de las familias, no a un intento de borrar la identidad católica de la escuela». Estas justificativas también fueron objeto de críticas por parte de los padres de familia: la Institución ofrecía catecismo para los sacramentos de la primera comunión y la confirmación, catecismo que fue retirado.

Algunas estatuas como las de La Virgen María y el Niño Jesús ya fueron removidas del campus; anualmente los niños coronaban a la Virgen María, en este colegio católico ubicado en San Anselmo, California.

Frente a este tema, se pronunció la Hermana Maureen McInerney, priora general de las Dominicas de San Rafael, fundadoras de la Institución, quien declaró que las Hermanas ya no participan de asuntos cotidianos en la Institución.

Michael Brown, de la Arquidiócesis de San Francisco, también afirmó que seguirá en comunicación con la Institución de carácter privado, ya que existe una preocupación pública en torno al tema. (CR/scm)