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Xirivella – Valencia (Lunes, 03-09-2018, Gaudium Press) Varias decenas de mujeres que han dado a luz en el último año y que se encuentran embarazadas participaron el domingo 2 de septiembre la tradicional procesión en honor a San Ramón Nonato que tiene lugar todos los años en Xirivella, municipio español de la Comunidad Valenciana.
Los tributos en honor al patrono de las madres en gestación, cuya festividad ocurre el 31 de agosto, fueron organizados por la Parroquia de San Ramón y San Vicente Ferrer, y los Calvarios de San Ramón, con la colaboración de las Clavariesas de la Virgen de los Desamparados y el Ayuntamiento de Xirivella.
Los homenajes iniciaron a las 12:00 horas con el volteo de campanas como ofrenda a Nuestra Señora y a San Ramón, y una misa solemne que ocurrió a las 13:00 horas.
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| San Ramón Nonato en compañía de la Mare de Déu en la procesion del año 2017 / Foto: Víctor Gutiérrez – AVAN. |
La procesión comenzó alrededor de las 21:00 horas, cuando la imagen venerada de San Ramón Nonato inició su recorrido por las principales vías del municipio valenciano en compañía de la imagen de la Mare de Déu.
Ambas imágenes posesionaron en compañía de mujeres embarazadas que portaron cirios encendidos por todo el recorrido y pidieron a San Ramón Nonato su protección en el parto. Las madres que dieron a luz en el último año también agradecieron al santo durante el camino de la procesión.
Ramón Nonato nació en Portecell, muy cerca de Barcelona, al iniciar el siglo XIII. El calificativo de Nonato ‘non natus’, se debe a la forma como llegó al mundo: fue extraído del vientre de su madre cuando ésta falleció durante el parto. De ahí que se le considere el patrono y protector de las embarazadas, y de las madres próximas a dar a luz.
Siendo muy joven ingresó a la Congregación de los Padres Mercedarios, sumándose a la misión en apoyo de los cautivos y de servicio a los rehenes que ofrecía la comunidad recién fundada por San Pedro Nolasco. Con esta misión, San Ramón es enviado a África para rescatar a los católicos que venían siendo esclavizados por los musulmanes, ofreciéndose él mismo como esclavo con tal de ganar la libertad de varios de los presos, quienes estaban en peligro de perder su fe.
Tras sufrir varios tormentos por parte de los mahometanos, el santo es liberado de la esclavitud y rescatado por San Pedro Nolasco quien envía al lugar a varios de sus religiosos con una fuerte suma de dinero.
A su regreso, Ramón Nonato es nombrado Cardenal por el Papa Gregorio IX, quien lo llama a colaborar en Roma. Pero esto no es posible, ya que el santo, al ir a pie de camino a la Ciudad Eterna, sufre una enfermedad, falleciendo a sus 36 años de edad. Su devoción surge en la Edad Media y perdura con el paso del tiempo.
Con información de AVAN.
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