{"id":175988,"date":"2024-08-22T08:48:26","date_gmt":"2024-08-22T13:48:26","guid":{"rendered":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/?p=175988"},"modified":"2024-08-22T08:48:26","modified_gmt":"2024-08-22T13:48:26","slug":"maria-verdadera-reina-del-universo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/content\/maria-verdadera-reina-del-universo\/","title":{"rendered":"Mar\u00eda, verdadera Reina del Universo"},"content":{"rendered":"

En medio al j\u00fabilo de toda la corte celeste, el Padre Eterno la coron\u00f3, comunic\u00e1ndole la omnipotencia de la s\u00faplica, el Hijo, la sabidur\u00eda; y el Esp\u00edritu Santo el amor.<\/i><\/p>\n

\"Maria<\/p>\n

Redacci\u00f3n (22\/08\/2024, <\/b><\/span>Gaudium Press<\/b><\/span><\/a><\/u>)<\/b><\/span><\/p>\n

Reina. Esa augusta prerrogativa de Nuestra Se\u00f1ora nos es presentada con mayor profundidad por el santo Fundador de los Redentoristas, al iniciar \u00e9l sus bellos y piadosos comentarios sobre la oraci\u00f3n de la \u2018Salve Reina\u2019:<\/span><\/p>\n

\u201cHabiendo sido la Sant\u00edsima Virgen elevada a la dignidad de Madre de Dios, con justa raz\u00f3n la Santa Iglesia la honra, y quiere de todos que la honren con el t\u00edtulo glorioso de Reina. Si el Hijo es Rey, dice el Pseudo-Atanasio, justamente la Madre debe considerarse y llamarse Reina. Desde el momento en que Mar\u00eda acept\u00f3 ser Madre del Verbo Eterno, dice San Bernardino de Siena, mereci\u00f3 tornarse Reina del mundo y de todas las criaturas. Si la carne de Mar\u00eda, concluye Arnoldo Abad, no fue diversa de la de Jes\u00fas, \u00bfc\u00f3mo, pues, de la monarqu\u00eda del Hijo puede ser separada la Madre?\u201d<\/span><\/p>\n

Por eso debe juzgarse que la gloria del reino no solo es com\u00fan entre la Madre y el Hijo, sino tambi\u00e9n que es la misma para ambos.<\/span><\/p>\n

\u201cSi Jes\u00fas es Rey del universo, del universo tambi\u00e9n es Mar\u00eda Reina, escribe Roberto Abad. De modo que, en la frase de San Bernardino de Siena, cuantas son las criaturas que sirven a Dios tantas tambi\u00e9n deben servir a Mar\u00eda. Por consiguiente, est\u00e1n sujetos a los dominios de Mar\u00eda los \u00c1ngeles, los hombres y todas las cosas del Cielo y de la Tierra, porque todo est\u00e1 tambi\u00e9n sujeto al imperio de Dios. Por eso Guerrico Abad le dirige estas palabras: \u2018Continuad, pues, dominando con toda la confianza; disponed vuestro arbitrio de los bienes de vuestro Hijo; pues, siendo Madre, y Esposa del Rey de los reyes, os pertenece como Reina el reino y el dominio sobre todas las criaturas\u2019 \u201d.<\/span><\/p>\n

\"Maria<\/p>\n

Mar\u00eda Reina: obra-prima de la misericordia de Dios<\/span><\/b><\/p>\n

A la luz de las precedentes ense\u00f1anzas, oigamos al Prof. Plinio Corr\u00eaa de Oliveira tejiendo algunos comentarios sobre la realeza de la Sant\u00edsima Virgen:<\/span><\/p>\n

Nuestra Se\u00f1ora Reina es un t\u00edtulo que expresa el siguiente hecho. Siendo Ella Madre de la segunda Persona de la Sant\u00edsima Trinidad y Esposa de la Tercera Persona, Dios, para honrarla, le dio el imperio sobre el universo: todos los \u00c1ngeles, todos los Santos, todos los hombres vivos, todas las almas del Purgatorio, todos los r\u00e9probos del Infierno y todos los demonios obedecen a la Sant\u00edsima Virgen. De suerte que hay una mediaci\u00f3n de poder, y no apenas de gracia, por la cual Dios ejecuta todas sus obras y realiza todas sus voluntades por intermedio de su Madre.<\/span><\/i><\/p>\n

Mar\u00eda no es apenas el canal por donde el imperio de Dios pasa, sino es tambi\u00e9n la Reina que decide por una voluntad propia, consonante a los designios del Rey. Nuestra Se\u00f1ora es una obra-prima de lo que podr\u00edamos llamar la habilidad de Dios para tener misericordia en relaci\u00f3n a los hombres\u2026<\/span><\/p>\n

Reina de los corazones<\/span><\/b><\/p>\n

Continua el Prof. Plinio Corr\u00eaa de Oliveira: <\/span>San Luis Grignion de Montfort hace referencia a esa linda invocaci\u00f3n que es Nuestra Se\u00f1ora Reina de los Corazones. Como coraz\u00f3n se entiende, en el lenguaje de las Sagradas Escrituras, la mentalidad del hombre, sobre todo su voluntad y sus designios.<\/i><\/span><\/p>\n

Nuestra Se\u00f1ora es Reina de los corazones como teniendo un poder sobre la mente y la voluntad de los hombres. Este imperio, Mar\u00eda lo ejerce, no por una imposici\u00f3n tir\u00e1nica, sino por la acci\u00f3n de la gracia, en virtud de la cual Ella puede liberar a los hombres de sus defectos y atraerlos, con soberano agrado y particular dulzura, para el bien que Ella les desea.<\/span><\/i><\/p>\n

Ese poder de Nuestra Se\u00f1ora sobre las almas nos revela cu\u00e1n admirable es su omnipotencia suplicante, que todo obtiene de la misericordia divina. \u00a1Tan augusto es este dominio sobre todos los corazones, que \u00e9l representa incomparablemente m\u00e1s que ser Soberana de todos los mares, de todas las v\u00edas terrestres, de todos los astros del cielo, tal es el valor de un alma, aunque sea la del \u00faltimo de los hombres!<\/span><\/i><\/p>\n

Vale notar, sin embargo, que la voluntad (esto es, el coraz\u00f3n) del hombre moderno, con alabables excepciones, es dominada por la revoluci\u00f3n. Aquellos, por tanto, que quieren escapar de ese yugo, deben unirse al Coraz\u00f3n por excelencia contra-revolucionario, al Coraz\u00f3n de mera criatura en el cual, abajo del Sagrado Coraz\u00f3n de Jes\u00fas, reside la Contra-Revoluci\u00f3n; al Sapiencial e Inmaculado Coraz\u00f3n de Mar\u00eda.<\/span><\/p>\n

Hagamos, entonces, a Nuestra Se\u00f1ora este pedido: \u201cMi Madre, sois Reina de todas las almas, incluso de las m\u00e1s duras y empedernidas que quieran abrirse a Vos. Os suplico, pues: sed Soberana de mi alma; quebrad las rocas interiores de mi esp\u00edritu y las resistencias abyectas del fondo de mi coraz\u00f3n. Disolved, por un acto de vuestro imperio, mis pasiones desordenadas, mis voliciones p\u00e9simas, y el residuo de mis pecados pasados que en m\u00ed puedan haber quedado. Limpiadme, oh mi Madre, a fin de que yo sea enteramente vuestro\u201d.<\/span><\/p>\n

\"Maria<\/p>\n

Reina puesta para la salvaci\u00f3n del mundo<\/span><\/b><\/p>\n

Todav\u00eda sobre el t\u00edtulo de Nuestra Se\u00f1ora Reina, no menos elocuentes son estas palabras del Papa P\u00edo XII: La realeza de Mar\u00eda es una realidad ultraterrena (de otro mundo), que al mismo tiempo, entretanto, penetra hasta lo m\u00e1s \u00edntimo de los corazones y los toca en su esencia profunda, en lo que ellos tienen de espiritual e inmortal. <\/span><\/p>\n

El origen de las glorias de Mar\u00eda, el momento solemne que ilumina toda su persona y misi\u00f3n, es aquel en que, llena de gracia, dirigi\u00f3 al Arc\u00e1ngel Gabriel el Fiat, que expresaba su asentimiento a la disposici\u00f3n divina. Ella se tornaba as\u00ed, Madre de Dios y Reina, y recib\u00eda el oficio real de velar sobre la unidad y paz del g\u00e9nero humano. Por medio de Ella tenemos la firme esperanza de que la humanidad se ha de encaminar poco a poco en esta senda de la salvaci\u00f3n.<\/span><\/p>\n

\u00bfQu\u00e9 podr\u00edan, por tanto, hacer los cristianos en la hora actual, en que la unidad y la paz del mundo, y hasta las propias fuentes de la vida, est\u00e1n en peligro, si no volver la mirada para Aquella que se les presenta revestida del poder real? As\u00ed como Ella envolvi\u00f3 ya en su manto al Divino Ni\u00f1o, primog\u00e9nito de todas las criaturas y de toda la creaci\u00f3n (Col. I, 15), as\u00ed tambi\u00e9n se digne ahora envolver a todos los hombres y todos los pueblos con su vigilante ternura; se digne, como Sede de la Sabidur\u00eda, hacer brillar la verdad de las palabras inspiradas, que la Iglesia le aplica: \u201cPor mi intermedio reinan los reyes, y los magistrados administran la justicia; por medio de M\u00ed mandan los pr\u00edncipes y los soberanos gobiernan con rectitud\u201d. (Prov. VIII, 15-16)<\/span><\/p>\n

Si el mundo hoy combate sin treguas para conquistar su unidad y para asegurar la paz, la invocaci\u00f3n del reino de Mar\u00eda es, para m\u00e1s all\u00e1 de todos los medios terrenos y de todos los designios humanos de cualquier manera siempre defectuosos, el clamor de la fe y de la esperanza cristiana, firmes y fuertes en las promesas divinas y en los auxilios inagotables, que este imperio de Mar\u00eda difundi\u00f3 para la salvaci\u00f3n de la humanidad.<\/span><\/p>\n

Reina que vencer\u00e1 la Revoluci\u00f3n<\/span><\/b><\/p>\n

Viene a prop\u00f3sito otro pensamiento del Prof. Plinio Corr\u00eaa de Oliveira, particularmente oportuno en esta actual fase hist\u00f3rica, convulsionada por el caos en casi todas las actividades humanas:<\/span><\/p>\n

La realeza de Nuestra Se\u00f1ora, hecho incontestable en todas las \u00e9pocas de la Iglesia, vino siendo explicitada cada vez m\u00e1s a partir de San Luis Grignion de Montfort, hasta aquel 13 de julio de 1917, cuando Mar\u00eda anunci\u00f3 en F\u00e1tima: \u201c\u00a1Por fin, mi Inmaculado Coraz\u00f3n triunfar\u00e1!\u201d Es una victoria conquistada por la Virgen, es su calca\u00f1ar que otra vez aplastar\u00e1 la cabeza de la serpiente, quebrar\u00e1 el dominio del demonio y Ella, como triunfadora, implantar\u00e1 su Reino.<\/span><\/p>\n

Por tanto, debemos confiar en que Mar\u00eda ya determin\u00f3 atender las s\u00faplicas de sus hijos contra-revolucionarios, y que Ella, Soberana del universo, puede hacer a la Contra-Revoluci\u00f3n conquistar, en un relance, incontable n\u00famero de almas. Nuestra Se\u00f1ora Reina podr\u00e1 expulsar de esta Tierra revolucionarios impenitentes, que no quieren atender a su apelo, de manera que un d\u00eda Ella pueda decir: \u00a1por fin \u2013 seg\u00fan la promesa de F\u00e1tima \u2013 mi Coraz\u00f3n Inmaculado triunf\u00f3!<\/span><\/p>\n

(Peque\u00f1o Of\u00edcio de la Inmaculada Concepci\u00f3n Comentado; Monse\u00f1or Jo\u00e3o Cl\u00e1 Dias, EP; Artpress \u2013 S\u00e3o Paulo, 1997)<\/span><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"En medio al j\u00fabilo de toda la corte celeste, el Padre Eterno la coron\u00f3, comunic\u00e1ndole la omnipotencia de la s\u00faplica, el Hijo, la sabidur\u00eda; y el Esp\u00edritu Santo el amor. Redacci\u00f3n (22\/08\/2024, Gaudium Press) Reina. Esa augusta prerrogativa de Nuestra Se\u00f1ora nos es presentada con mayor profundidad por el santo Fundador de los Redentoristas, al… Ver art\u00edculo<\/a>","protected":false},"author":8,"featured_media":175989,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":[],"categories":[6],"tags":[4178,9847,511],"acf":[],"featured_image_src":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-content\/uploads\/2024\/08\/Maria-Reina-2.webp","newsletter_img":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-content\/uploads\/2024\/08\/Maria-Reina-2-aspect-ratio-570-300.webp","newsletter_date":"20240822","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/175988"}],"collection":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/users\/8"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=175988"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/175988\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/media\/175989"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=175988"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=175988"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=175988"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}