{"id":176984,"date":"2024-09-16T09:42:41","date_gmt":"2024-09-16T14:42:41","guid":{"rendered":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/?p=176984"},"modified":"2024-09-16T09:42:41","modified_gmt":"2024-09-16T14:42:41","slug":"seguir-a-cristo-o-al-demonio","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/content\/seguir-a-cristo-o-al-demonio\/","title":{"rendered":"\u00bfSeguir a Cristo o al demonio?"},"content":{"rendered":"
Seguir a Cristo o a \u201cSatan\u00e1s\u201d. \u00c9sta es la decisi\u00f3n que la Providencia nos invita a tomar en este domingo 24 del Tiempo Ordinario.<\/em><\/p>\n <\/p>\n Redacci\u00f3n (<\/strong>16\/09\/2024 09:28<\/strong>, <\/strong>Gaudium Press<\/strong><\/a>) <\/strong>Es una doctrina muy conocida y vigente entre nosotros que, despu\u00e9s del pecado de nuestros primeros padres en el para\u00edso terrenal, el sufrimiento, hasta entonces inexistente en la vida de hombres, se convirti\u00f3 en nuestro compa\u00f1ero inseparable. As\u00ed, no hay hombre que pase por este mundo y no sufra de alguna manera, por mucho que quiera evitar en todos los sentidos los dolores y las cruces cotidianas.<\/p>\n Sin embargo, no hay vocablo que hiera m\u00e1s los o\u00eddos del hombre contempor\u00e1neo que la palabra dolor y otros similares, porque, a causa del pecado original, el ser humano es llevado a creer que es posible alcanzar la gloria sin dolor y, por tanto, ser feliz sin sufrimiento.<\/p>\n Por eso, la liturgia de ayer domingo desarrolla el tema del sufrimiento. En la primera lectura, del libro del profeta Isa\u00edas [1], vemos descrito al Siervo Sufriente que entrega todo su cuerpo a las cruces que Dios le impone:<\/p>\n \u201cOfrec\u00ed mi espalda para que me golpearan y mis mejillas para que me arrancaran la barba; No apart\u00e9 mi rostro de las bofetadas y de los esputos\u201d (Is 50,6).<\/em><\/p>\n Tanto en este extracto seleccionado de Isa\u00edas como en el salmo responsorial, la liturgia demuestra cu\u00e1l debe ser la actitud adecuada del alma ante los dolores y las cruces:<\/p>\n \u00a0<\/em>\u201cPero el Se\u00f1or Dios es mi auxilio, por eso no me dej\u00e9 desanimar, mantuve mi rostro impasible como una piedra, porque s\u00e9 que no ser\u00e9 humillado\u201d (Is 50,7).<\/em><\/p>\n Y el salmista completa la s\u00faplica:<\/p>\n Las cuerdas de la muerte me sujetaron, las ataduras del abismo me apretaron; La angustia y la tristeza me invadieron. Entonces invoqu\u00e9 al Se\u00f1or: \u201cS\u00e1lvame la vida, oh Se\u00f1or\u201d (Sal 116, 3-4).<\/em><\/p>\n En otras palabras, ante la cruz y el dolor, debemos, s\u00ed, soportarlos, pero no de forma meramente pasiva, sino ofreci\u00e9ndolos al mismo Dios y a su divina voluntad, pidi\u00e9ndole constantemente su ayuda. De esta manera, nuestros sufrimientos no ser\u00e1n in\u00fatiles. Esto se debe a que, seg\u00fan san Pablo, tendremos presente que una tribulaci\u00f3n moment\u00e1nea y pasajera nos traer\u00e1 gloria eterna e inconmensurable (cf. 2Cor 4,17).<\/p>\n En la carta de Santiago, el Ap\u00f3stol habla de la importancia de probar nuestra Fe a trav\u00e9s de las obras:<\/p>\n \u00a0\u201cHermanos m\u00edos, \u00bfde qu\u00e9 le sirve a alguien decir que tiene fe si no la pone en pr\u00e1ctica?\u201d (Santiago 2,14)<\/em><\/p>\n \u00bfCu\u00e1l puede ser entonces una manera de demostrar la fe por las obras? La virtud sobrenatural de la fe tiene por objeto las realidades y promesas sobrenaturales que Dios nos hizo. Ahora bien, la virtud de la caridad, la m\u00e1s excelente entre todas las virtudes (cf. 1Cor 13,13), nos hace amar en s\u00ed mismo al Autor de estas promesas, es decir, por ser quien es, aunque no nos concediese ninguna recompensa en esta vida ni en el futuro.<\/p>\n As\u00ed, al aceptar nuestras cruces diarias por amor a \u00c9l, ponemos en pr\u00e1ctica nuestra fe. Porque, si es cierto que seremos recompensados \u200b\u200ben la vida post mortem<\/em>, no renunciamos al m\u00e1s m\u00ednimo sufrimiento para, mediante este acto de amor, demostrar a Dios que efectivamente queremos disfrutar de su visi\u00f3n eterna, y le mostramos que hacemos todo lo posible para lograrlo.<\/p>\n Cristo o el demonio<\/strong><\/p>\n Finalmente, en el Evangelio de San Marcos, el Divino maestro pregunta a sus disc\u00edpulos qu\u00e9 dec\u00edan de \u00e9l. Y San Pedro, el pr\u00edncipe de los ap\u00f3stoles, anticipa la respuesta y hace su confesi\u00f3n de fe: \u201cT\u00fa eres el Mes\u00edas\u201d (Mc 8,29). En la versi\u00f3n del suceso narrada por San Mateo, vemos que, despu\u00e9s de la confesi\u00f3n de Pedro, Jes\u00fas lo proclama bienaventurado, porque no fue un ser humano quien lo hab\u00eda llevado a hacer tal profesi\u00f3n de fe, sino su Padre que est\u00e1 en los cielos y, por ello, lo declar\u00f3 la piedra sobre la que se fundar\u00eda la Iglesia (cf. Mt 16,17-19).<\/p>\n Apenas dos vers\u00edculos despu\u00e9s, cuando Nuestro Se\u00f1or anuncia la Pasi\u00f3n a sus disc\u00edpulos, el mismo Pedro, poco antes movido por el Esp\u00edritu Santo, llev\u00f3 aparte a su Maestro y le reprendi\u00f3 por anunciarles sus sufrimientos. Y el primer Papa rog\u00f3 entonces a Dios que no permitiera tal cosa a quien tanto amaba (cf. Mt 16, 21-23). A lo que Jes\u00fas intervino:<\/p>\n \u201c\u00a1Al\u00e9jate de m\u00ed, Satan\u00e1s! Sois una piedra de tropiezo para m\u00ed, porque no pens\u00e1is como Dios, sino como los hombres\u201d (Mt 16,23).<\/em><\/p>\n \u00bfQu\u00e9 pas\u00f3? San Pedro, ya no movido por el Esp\u00edritu Santo, sino por criterios err\u00f3neos, disociaba la gloria del dolor, y por eso quiso quitarle la Cruz a su Divino Maestro, lo que le mereci\u00f3 ser llamado satan\u00e1s por Dios mismo, que ya lo hab\u00eda proclamado primer Papa.<\/p>\n Lecci\u00f3n para nosotros: per crucem ad lucem<\/em>, a trav\u00e9s de la cruz llegamos a la luz y obtenemos la gloria. Pidamos que la Divina Providencia, por medio de San Pedro, nos conceda la gracia de no ser nunca \u201cdemonios\u201d, esquivando el sufrimiento diario enviado para nuestra santificaci\u00f3n, sino que sigamos a Cristo completamente, como \u00e9l nos dijo:<\/p>\n \u201cEl que quiera venir en pos de m\u00ed, debe negarse a s\u00ed mismo, tomar su cruz cada d\u00eda y seguirme\u201d (Lucas 9,23).<\/em><\/p>\n Por Guillermo Maia<\/em><\/p>\n ___<\/p>\n [1] El profeta Isa\u00edas es considerado el \u201cquinto evangelista\u201d, por prever la pasi\u00f3n del Divino Salvador 6 siglos antes de que ocurriera.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Seguir a Cristo o a \u201cSatan\u00e1s\u201d. \u00c9sta es la decisi\u00f3n que la Providencia nos invita a tomar en este domingo 24 del Tiempo Ordinario. 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