{"id":177760,"date":"2024-10-06T13:01:31","date_gmt":"2024-10-06T18:01:31","guid":{"rendered":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/?p=177760"},"modified":"2024-10-06T13:08:02","modified_gmt":"2024-10-06T18:08:02","slug":"introduccion-a-la-revolucion-tendencial-para-dummies-i","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/content\/introduccion-a-la-revolucion-tendencial-para-dummies-i\/","title":{"rendered":"Introducci\u00f3n a la Revoluci\u00f3n Tendencial para dummies – I"},"content":{"rendered":"

Revoluci\u00f3n Tendencial, expresi\u00f3n a\u00fan misteriosa para la generalidad, pero que como su antecesor, la Revoluci\u00f3n Cultural, tenemos la certeza de que estar\u00e1 en el lenguaje com\u00fan de muchos, much\u00edsimos\u2026<\/em><\/p>\n

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Redacci\u00f3n (<\/strong>05\/10\/2024 16:01<\/strong>, <\/strong>Gaudium Press<\/strong><\/a>)<\/strong> Revoluci\u00f3n Tendencial<\/em>, expresi\u00f3n a\u00fan misteriosa para la generalidad, pero que como su antecesor, tenemos la certeza de que estar\u00e1 en el lenguaje com\u00fan de muchos, much\u00edsimos\u2026<\/p>\n

Hubo un tiempo en que el t\u00e9rmino Revoluci\u00f3n Cultural<\/em> fue privilegio de unos pocos, muy pocos, que percibieron que la guerra que desarrollaba el comunismo contra las naciones libres ya no solo era de ej\u00e9rcitos o diplom\u00e1tica, ni siquiera solo lo que en su tiempo se llam\u00f3 \u201cpsicol\u00f3gica\u201d (guerra psicol\u00f3gica revolucionaria<\/em>), sino que hab\u00eda desbordado al ambiente cultural, a la cultura.<\/p>\n

Varias veces en reuniones internas y particularmente a algunos de sus disc\u00edpulos que trabajaban en libros, el prof. Plinio Corr\u00eaa de Oliveira llam\u00f3 la atenci\u00f3n a pensamientos como el siguiente de Antonio Gramsci, fundador del Partido Comunista italiano: \u201cEl sentido com\u00fan es la filosof\u00eda de los no fil\u00f3sofos, es decir, la concepci\u00f3n del mundo absorbida acr\u00edticamente por los diversos ambientes sociales y culturales en los que se desarrolla la individualidad moral del hombre medio\u201d. (1) Las fuerzas de izquierda deb\u00edan conquistar no solo las mentes de los fil\u00f3sofos, sino y sobre todo, el \u2018sentido com\u00fan\u2019, las mentes especulativa y pr\u00e1ctica de los pueblos.<\/p>\n

Para Gramsci, de nada serv\u00eda la conquista del poder por parte de la dictadura del proletariado, si ese proletariado segu\u00eda profesando unos principios culturales burgueses o tradicionales. Era preciso conquistar su \u2018sentido com\u00fan\u2019, su cultura, es decir su visualizaci\u00f3n del mundo, haciendo que esta visualizaci\u00f3n fuese materialista y no espiritualista, mucho menos si era una cosmovisi\u00f3n cristiana.<\/p>\n

Por ejemplo, para Gramsci el comunismo habr\u00eda fracasado si, a\u00fan despu\u00e9s de dominar un pa\u00eds, sus integrantes a\u00fan cre\u00edan fehacientemente en la vida eterna despu\u00e9s de la muerte. Y viceversa, si los habitantes rechazaban la trascendencia espiritual, aunque a\u00fan vivieran en un r\u00e9gimen burgu\u00e9s el camino al socialismo real estaba allanado. El comunismo no se hac\u00eda realidad solo controlando el Estado, sino controlando las mentes de los hombres, haciendo que su visi\u00f3n cultural fuera marxista: era la Revoluci\u00f3n Cultural que se iba conceptualizando.<\/p>\n

Si el punto clave de este concepto era la instauraci\u00f3n de una mentalidad materialista en el \u2018sentido com\u00fan\u2019 del pueblo \u2014que despu\u00e9s originar\u00eda o justificar\u00eda un orden de cosas materialista, al estilo dictadura del proletariado o m\u00e1s all\u00e1\u2014 ya vemos claro que la Revoluci\u00f3n Cultural no es privilegio de los publicistas e ide\u00f3logos marxistas: tambi\u00e9n har\u00eda Revoluci\u00f3n Cultural un Hollywood que con su guiones y tipos humanos promoviese ese materialismo igualitario que subyace tras el comunismo.<\/p>\n

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Es la Revoluci\u00f3n Cultural, en cualquier caso, un cambio de mentalidad, desde una mentalidad tradicional o conservadora o burguesa, hacia una mentalidad m\u00e1s revolucionaria. Y para ello, es clara la importancia de atacar las ra\u00edces culturales cristianas de un pueblo de origen cristiano, ir apagando de todas las maneras posibles su afecto al cristianismo y su pensar cristiano, lograr que los pueblos se alejen del sentir de la Iglesia. Pero tambi\u00e9n ir minando la consideraci\u00f3n a los s\u00edmbolos patrios que refieren a los inicios de una sociedad y a los \u00edconos tradicionales de un pueblo; ir tambi\u00e9n reescribiendo la Historia, pudriendo el afecto que el pueblo tiene a las ra\u00edces que hincan en el pasado; ir pervirtiendo la moral colectiva. En definitiva, ir reescribiendo la cultura. S\u00ed, la Revoluci\u00f3n Cultura, es un movimiento verdaderamente imperialista, en el sentido de una transformaci\u00f3n total y muy profunda del hombre, y a partir del hombre de las sociedades.<\/p>\n

Hoy, gracias a Dios, el t\u00e9rmino Revoluci\u00f3n Cultural es moneda com\u00fan entre los te\u00f3ricos conservadores, quienes afilan sus bater\u00edas no solo contra una reforma econ\u00f3mica de corte marxista, sino tambi\u00e9n contra un deseo de imposici\u00f3n total del aborto, que denuncian una campa\u00f1a para la colectivizaci\u00f3n de los medios de producci\u00f3n o el ahogo de la iniciativa privada, pero tambi\u00e9n enfocan sus ca\u00f1ones hacia leyes que destruyen la familia seg\u00fan el derecho natural.<\/p>\n

Sin embargo, hay un campo que sigue siendo privilegio de unos pocos, \u00e1rea que es fundamental en la lucha entre la Revoluci\u00f3n y la Contra Revoluci\u00f3n, y es lo que el prof. Plinio Corr\u00eaa de Oliveira llamaba de Revoluci\u00f3n Tendencial<\/em>, algo a\u00fan m\u00e1s profundo y abarcativo que la propia Revoluci\u00f3n Cultural.<\/p>\n

El lenguaje de la Revoluci\u00f3n Tendencial<\/strong><\/p>\n

Establece el Dr. Plinio en su ensayo Revoluci\u00f3n y Contra Revoluci\u00f3n<\/em> que la Revoluci\u00f3n Tendencial<\/em> es la fase m\u00e1s profunda de la Revoluci\u00f3n, incluso m\u00e1s profunda que la Revoluci\u00f3n en las Ideas: \u201cEsas tendencias desordenadas, que por su propia naturaleza luchan por realizarse, ya no conform\u00e1ndose con un orden de cosas que le es contrario, comienzan por modificar las mentalidades, los modos de ser, las expresiones art\u00edsticas y las costumbres, sin al inicio tocar de modo directo \u2014habitualmente, por lo menos\u2014 en las ideas\u201d. (2) Vemos ya aqu\u00ed que el surgimiento de tendencias desordenadas, de inclinaciones desordenadas en el ser humano, es incluso previa a un cambio de mentalidad, a un cambio en las ideas dominantes que rigen la vida del hombre.<\/p>\n

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Dr. Plinio profundiza en los elementos de la Revoluci\u00f3n Tendencial, y muestra su retroalimentaci\u00f3n con las ideas revolucionarias:<\/p>\n

\u201cLa cultura. Las ideas revolucionarias dan a las tendencias de las cuales nacieron el medio de afirmarse con fueros de ciudadan\u00eda, a los ojos del propio individuo y de terceros. Ellas sirven al revolucionario para quebrantar en estos \u00faltimos las convicciones verdaderas, y para as\u00ed desencadenar o agravar en ellos la revuelta de las pasiones. Ellas son inspiraci\u00f3n y molde para las instituciones generadas por la Revoluci\u00f3n. Esas ideas pueden encontrarse en los m\u00e1s variados ramos del saber o de la cultura, por es dif\u00edcil que alguno de ellos no est\u00e9 implicado, por lo menos indirectamente, en la lucha entre la Revoluci\u00f3n y la Contra Revoluci\u00f3n. (3) Vemos ac\u00e1 que en la mente del Dr. Plinio \u2018tendencias desordenadas\u2019 es sin\u00f3nimo de \u2018pasiones desordenadas\u2019. (4) Dr. Plinio establecer\u00e1 en Revoluci\u00f3n y Contra Revoluci\u00f3n (R-CR), <\/em>que las pasiones se encuentran especialmente m\u00e1s desordenadas en la medida que favorecen el orgullo <\/em>igualitario, que genera animadversi\u00f3n a cualquier jerarqu\u00eda, y la sensualidad <\/em>desbocada, es decir el gozo intemperante de cualquier placer sensible, que nutre la animadversi\u00f3n a cualquier recta norma moral, particularmente la moral cristiana.<\/p>\n

As\u00ed, cuando estamos en presencia de una superioridad, es normal que el hombre \u2014a la par de una primera admiraci\u00f3n\u2014 sienta un cierto dolor por no poseerla. Sin embargo, la raz\u00f3n nos manda a amar esa superioridad en s\u00ed, como reflejo que es de Dios. Si entretanto, se impone la desordenada pasi\u00f3n dolor<\/em>, esta pasi\u00f3n favorece el orgullo igualitario deseoso de destruir toda leg\u00edtima jerarqu\u00eda, sea en el campo religioso (Protestantismo), en el civil (Revoluci\u00f3n Francesa), en el econ\u00f3mico (Revoluci\u00f3n Comunista) o incluso la jerarqu\u00eda interna del hombre que sujeta la sensibilidad a la raz\u00f3n (Revoluci\u00f3n Sorboniana, \u2018la imaginaci\u00f3n la poder\u2019). De forma an\u00e1loga, ante un bien sensible, surgir\u00e1 en un primer movimiento la pasi\u00f3n deseo<\/em> o gozo<\/em>. Pero si bien esa pasi\u00f3n puede estar en consonancia con la recta raz\u00f3n (gozar de un buen jugo tras una dura sesi\u00f3n de ejercicio) tambi\u00e9n puede ir en contrav\u00eda de la raz\u00f3n y la moral (como la norma que dicta no desear la mujer del pr\u00f3jimo). Si la pasi\u00f3n que alimenta el acto desordenado vence, el resultado final podr\u00e1 ser el odio a toda ley moral que restrinja de alguna manera cualquier apetito sensible: es la sociedad an\u00e1rquica y sensual del peace and love<\/em>, del haga lo que quiera, de la destrucci\u00f3n de la familia, que m\u00e1s o menos se va tornando realidad por doquier.<\/p>\n

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Foto: Unplash<\/p><\/div>\n

Continuemos ahora con el Dr. Plinio, profundizando en ese sutil, misterioso pero real lenguaje tendencial que puede desordenar las pasiones:<\/p>\n

\u201cLas artes. En cuanto a las artes, como Dios estableci\u00f3 misteriosas y admirables relaciones entre ciertas formas, sonidos, perfumes y sabores de un lado, y de otro lado ciertos estados de alma, es claro que por estos medios se pueden influenciar a fondo las mentalidades<\/strong> e inducir a personas, familias y pueblos a la formaci\u00f3n de un estado de esp\u00edritu profundamente revolucionario. Basta recordar la analog\u00eda entre el esp\u00edritu de la Revoluci\u00f3n Francesa y las modas que durante ella surgieron. O entre las efervescencias revolucionarias de hoy y las presentes extravagancias de las modas y de las escuelas art\u00edsticas dichas avanzadas\u201d. (5) [ndr. La negrita no est\u00e1 en el original].<\/p>\n

El texto resaltado est\u00e1 el n\u00facleo de la Revoluci\u00f3n Tendencial: es posible influir y hasta crear una mentalidad revolucionaria, a partir de un juego con los elementos que componen la materia creada, como son formas, colores, sabores, sonidos, perfumes, texturas, etc. La combinaci\u00f3n de estos elementos, puede ser revolucionaria, y, es claro, tambi\u00e9n contrarrevolucionaria. Profundizaremos en esto m\u00e1s adelante.<\/p>\n

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Por en cuanto, completemos la visualizaci\u00f3n general de la Revoluci\u00f3n Tendencial, en las explicitaciones del Dr. Plinio en R-CR:<\/p>\n

\u201cLos ambientes. En cuanto a los ambientes, en la medida en que favorecen costumbres buenas o malas, pueden oponer a la Revoluci\u00f3n las admirables barreras de reacci\u00f3n, o por lo menos de la inercia, de todo cuanto es sanamente consuetudinario; o pueden comunicar a las almas las toxinas y las energ\u00edas tremendas del esp\u00edritu revolucionario\u201d. (6) Siendo los ambientes una combinaci\u00f3n de ciertos elementos tangibles, se aplica lo dicho arriba para las artes. Es claro, todo ambiente responde a un arte, es decir termina siendo una combinaci\u00f3n de elementos que expresan y favorecen un estado de alma.<\/p>\n

Entonces, concluyamos esta primera entrega, intentando una definici\u00f3n primera de de Revoluci\u00f3n Tendencial<\/em> como el juego con elementos sensibles (formas, colores, sabores, olores, sonidos, etc.) presentes en las artes, los ambientes, las modas, en toda la realidad sensible que nos circunda, que ayuda al desorden de las pasiones y favorece la creaci\u00f3n de una mentalidad revolucionaria, igualitaria y sensual. Ya se percibe, que es este un campo m\u00e1s profundo que la Revoluci\u00f3n Cultural seg\u00fan la entiende la mayor\u00eda, a la manera de un comercio de ideas. No: aqu\u00ed, son tendencias<\/em>, artes, modas, ambientes, que no hablan con palabras sino con lo que simbolizan.<\/p>\n

Como se percibe, estamos en la introducci\u00f3n de la introducci\u00f3n. Pero bien, Roma no se construy\u00f3 en un d\u00eda, y la teor\u00eda de la Contra Revoluci\u00f3n tampoco la hizo el Dr. Plinio en otro.<\/p>\n

Continuamos pronto con el favor de Dios.<\/p>\n

Por Sa\u00fal Castiblanco<\/em><\/p>\n

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2 Plinio Corr\u00eaa de Oliveira. Revolu\u00e7\u00e3o e Contra-Revolu\u00e7\u00e3o. 5\u00aa ed. Editora Retornarei. S\u00e3o Paulo. 2002. pp. 40-41.<\/p>\n

3 Ibidem. p. 84.<\/p>\n

4 Define el tomismo a las pasiones como \u201cmovimiento del apetito nacido de la aprenhensi\u00f3n del bien o del mal sensible con cierta conmoci\u00f3n refleja m\u00e1s o menos intensa en el organismo\u201d. (Royo Mar\u00edn. Teolog\u00eda de la Perfecci\u00f3n Cristiana. N. 249) Son pues las pasiones, movimientos nacidos de los dos apetitos sensibles humanos, el concupiscible (pasiones de amor, odio, deseo, aversi\u00f3n o fuga, gozo, tristeza o dolor) y el irascible (pasiones de esperanza, desesperaci\u00f3n, audacia, temor, ira). Consideradas en su sentido filos\u00f3fico son neutras, y obtienen su calificaci\u00f3n moral cuando acompa\u00f1an los actos voluntarios del hombre, que se valoran por su objeto propio, fin y circunstancias. De tal manera que la pasi\u00f3n amor<\/em> es neutra, pero si la pasi\u00f3n acompa\u00f1a una voluntad que ama un objeto malo o en una intensidad o proporci\u00f3n indebida, la pasi\u00f3n se torna desordenada. Amar no es malo, ni querer hacer un buen pastel tampoco, por el contrario la pasi\u00f3n al cocinar puede colaborar para el buen fin de hacer una rica torta del cumplea\u00f1os para el esposo. Pero si para esto, se roba la harina de la vecina\u2026 la pasi\u00f3n es desordenada y facilita el mal.<\/p>\n

5 Ibidem. p. 85.<\/p>\n

6 \u00cddem.<\/p>\n

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1 Antonio Gramsci y la Revoluci\u00f3n Cultural. Conferencias pronunciadas por el R.P. Alfredo S\u00e1enz los d\u00edas 12 y 13 de Agosto de 1987, en la sede de la Corporaci\u00f3n de Abogados Cat\u00f3licos, Libertad 850, Capital Federal. En: https:\/\/www.quenotelacuenten.org\/wp-content\/uploads\/2019\/01\/S%C3%A1enz.-Gramsci-y-la-Revolucion-Cultural.pdf<\/a><\/p>\n