{"id":182399,"date":"2025-02-03T15:37:06","date_gmt":"2025-02-03T20:37:06","guid":{"rendered":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/?p=182399"},"modified":"2025-02-03T15:37:06","modified_gmt":"2025-02-03T20:37:06","slug":"presencia-real-fugaz-o-permanente","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/content\/presencia-real-fugaz-o-permanente\/","title":{"rendered":"Presencia real\u2026 \u00bffugaz o permanente?"},"content":{"rendered":"
Hay una cierta man\u00eda de novedades sumada a un relativismo, en la consideraci\u00f3n de la Eucarist\u00eda.<\/em><\/p>\n Redacci\u00f3n (<\/strong>03\/02\/2025 15:25<\/strong>, <\/strong>Gaudium Press<\/strong><\/a>)<\/strong> En nuestros d\u00edas se verifica una cierta deriva \u2013mejor ser\u00eda decir una deriva cierta\u2013 en algunas opiniones volcadas en escritos y declaraciones por parte de quienes pasan por te\u00f3logos, biblistas o peritos en liturgia\u2026 como si para hacer valer esos t\u00edtulos, adem\u00e1s del diploma de rigor, no fuese necesaria la fidelidad a la Revelaci\u00f3n y al Magisterio. Porque a la \u201cman\u00eda de novedades\u201d que ya Le\u00f3n XIII evocaba en el t\u00edtulo de su enc\u00edclica \u201cRerum novarum\u201d, se suma en los tiempos actuales un tenaz relativismo doctrinario y pr\u00e1ctico.<\/p>\n Consideremos que un error no es irrelevante cuando atenta contra un punto central de la fe y pasa a tomar aires de ciudadan\u00eda en el cuerpo eclesial.<\/p>\n Pues bien, de modo expl\u00edcito o insinuado, hay quienes sostienen que, dado que la Eucarist\u00eda fue instituida para ser alimento, solo se concibe darle culto apropiado en el marco de una Misa y recibi\u00e9ndola en comuni\u00f3n. Esto equivale a suponer que la adoraci\u00f3n fuera de la celebraci\u00f3n no tiene mayor sentido. Cuando mucho, conciben la reserva del pan consagrado en un sagrario para llevarlo a los enfermos y\u2026 punto final. Eso de adoraci\u00f3n solemne, procesiones con el Sant\u00edsimo, vigilias nocturnas, \u00bfpara qu\u00e9, si en ellas no hay consagraci\u00f3n ni comuni\u00f3n? Pues s\u00ed, en nuestros d\u00edas hay quienes piensan as\u00ed.<\/p>\n Innovaciones que deslegitiman obras<\/strong><\/p>\n Algunos de esos innovadores van m\u00e1s lejos y llegan a sostener que la presencia real de Jes\u00fas se da solo en el momento en que la asamblea est\u00e1 reunida; acabada la celebraci\u00f3n, se acaba la presencia. Suponen que esa noci\u00f3n se ajusta con lo dicho en el Evangelio: \u201cdonde dos o tres est\u00e1n reunidos en mi nombre, all\u00ed estoy yo en medio de ellos\u201d (Mt 18, 20). Esa es su pobre, pobr\u00edsima, ex\u00e9gesis. Si esto fuera as\u00ed, las asociaciones y carismas que promueven la adoraci\u00f3n eucar\u00edstica \u2013 por ejemplo, nuestra Federaci\u00f3n Mundial de las Obras Eucar\u00edsticas de la Iglesia \u2013 ser\u00edan una extravagancia que una espiritualidad responsable ir\u00e1 limitando hasta lograr su extinci\u00f3n\u2026<\/p>\n Dejemos de lado, y bien distante, la man\u00eda de novedades y las opiniones temerarias, y vayamos a las aguas l\u00edmpidas de la doctrina cat\u00f3lica, diciendo que el culto de adoraci\u00f3n dado a la Eucarist\u00eda es una consecuencia l\u00f3gica e inmediata del dogma de la Presencia Real. Desde su instituci\u00f3n en la \u00daltima Cena, es incuestionable que la Eucarist\u00eda debe ser tenida en cuenta como el Emanuel, el Dios con nosotros. Lo que no sea eso, es demolici\u00f3n de dogma eucar\u00edstico y del mismo Evangelio.<\/p>\n Como una saludable reacci\u00f3n a los errores protestantes, en el siglo XVI la catequesis eucar\u00edstica fue implosionada y con ella el culto a la Santa Hostia. En nuestros tiempos, el \u00faltimo Concilio Vaticano reafirma sin ambages la permanencia de Cristo en la Hostia consagrada, por ejemplo, en los n\u00fameros 5 y 18 del Decreto Presbyterorum Ordinis. Tambi\u00e9n el \u201cCredo del Pueblo de Dios\u201d de Pablo VI reza entre otras verdades de fe: \u201c(\u2026) La misma existencia, despu\u00e9s de celebrado el sacrificio, permanece presente en el Sant\u00edsimo Sacramento, el cual, en el tabern\u00e1culo del altar, es como el coraz\u00f3n vivo de nuestros templos. Por lo cual estamos obligados, por obligaci\u00f3n ciertamente suav\u00edsima, a honrar y adorar en la Hostia Santa que nuestros ojos ven, al mismo Verbo encarnado que ellos no pueden ver, y que, sin embargo, se ha hecho presente delante de nosotros sin haber dejado los cielos\u201d. \u00bfSe puede hablar m\u00e1s claro?<\/p>\n A su vez, otro importante documento posconciliar, el \u201cCatecismo de la Iglesia Cat\u00f3lica\u201d, dice en su t\u00f3pico 1377: \u201cLa presencia eucar\u00edstica de Cristo comienza en el momento de la consagraci\u00f3n y dura tambi\u00e9n mientras subsistan las especies eucar\u00edsticas\u201d.\u00a0 A bien decir, todos los Papas y todos los Concilios dan por supuesta la excelencia de la adoraci\u00f3n eucar\u00edstica fuera de la Misa.<\/p>\n Hay que retomar la piedad eucar\u00edstica<\/strong><\/p>\n Es triste constatar hasta qu\u00e9 punto la inapetencia hacia la Eucarist\u00eda campea entre los bautizados. \u00bfQui\u00e9n no se acuerda que, a\u00fan en d\u00e9cadas recientes, al pasar frente a una iglesia las personas se santiguaban y, si pod\u00edan, entraban para hacer una r\u00e1pida visita al Sant\u00edsimo? Esos gestos sencillos y al alcance de todos van muriendo, los templos son cada vez menos frecuentados, cuando no se mantienen cerrados, o se profanan o se venden. Se cuenta que cierta vez un incr\u00e9dulo confidenci\u00f3 a un sacerdote: \u201cMe sorprende la indiferencia de los cat\u00f3licos por la Eucarist\u00eda. Si yo creyese en la presencia real, ir\u00eda todos los d\u00edas a arrodillarme ante \u00c9l\u201d. Con sinceridad o con mofa, esa fue su declaraci\u00f3n.<\/p>\n En todo caso, no se duda del pleno ajuste del culto eucar\u00edstico fuera de la Misa. Esta pr\u00e1ctica tiene s\u00f3lidos fundamentos en la reflexi\u00f3n teol\u00f3gica, en la veneraci\u00f3n con que las especies sacramentales siempre han sido tratadas, en los frutos de santidad a que dio origen. Adem\u00e1s \u00a1de cu\u00e1ntos milagros eucar\u00edsticos est\u00e1 regada la historia del cristianismo!<\/p>\n Recientemente la pastoral de la Iglesia ha puesto oportunamente en relieve el culto de la Palabra, incluso en celebraciones fuera de la Misa. Pero \u00a1cu\u00e1nto m\u00e1s apropiado es que sea dado culto a la Palabra hecha carne! Porque la adoraci\u00f3n eucar\u00edstica no es una devoci\u00f3n m\u00e1s, como, por ejemplo, el rezo del V\u00eda Crucis o los sufragios por las almas del Purgatorio, que son, por cierto, devociones excelentes y tan recomendables.<\/p>\n \u201cEste es mi cuerpo, esta es mi sangre, hagan esto en conmemoraci\u00f3n m\u00eda\u201d, palabras inequ\u00edvocas dichas por Jes\u00fas horas antes de expirar, fueron como sus \u00faltimas voluntades, su testamento. Al d\u00eda siguiente, desde la Cruz, nos dejar\u00eda tambi\u00e9n a su Madre. \u00a1Qu\u00e9 preciosos legados, la Eucarist\u00eda y Mar\u00eda!<\/p>\n Al decir \u201ceste es mi cuerpo, esta es mi sangre\u201d \u00bfhabr\u00eda Jesucristo escogido ese momento solemne para hablar de ficciones, enga\u00f1ar a sus disc\u00edpulos, y arrojar a la Iglesia en la idolatr\u00eda?<\/p>\n En desagravio por los errores y confusiones que corren a prop\u00f3sito de la Eucarist\u00eda, concluyamos diciendo la oraci\u00f3n que \u00e9l \u00c1ngel de Portugal ense\u00f1\u00f3 a los pastorcitos de F\u00e1tima: \u201cDios m\u00edo, yo creo, adoro, espero y te amo. Y te pido perd\u00f3n por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman\u201d.<\/p>\n Por el P. Rafael Ibarguren, EP<\/em><\/p>\n (Publicado originalmente en www.opera-eucharistica.org)<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Hay una cierta man\u00eda de novedades sumada a un relativismo, en la consideraci\u00f3n de la Eucarist\u00eda. Redacci\u00f3n (03\/02\/2025 15:25, Gaudium Press) En nuestros d\u00edas se verifica una cierta deriva \u2013mejor ser\u00eda decir una deriva cierta\u2013 en algunas opiniones volcadas en escritos y declaraciones por parte de quienes pasan por te\u00f3logos, biblistas o peritos en liturgia\u2026… Ver art\u00edculo<\/a>","protected":false},"author":8,"featured_media":182400,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_acf_changed":false,"footnotes":""},"categories":[6],"tags":[27,45,10480,8337],"class_list":["post-182399","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-espiritualidad","tag-adoracion-eucaristica","tag-eucaristia","tag-presencia-real","tag-relativismo"],"acf":[],"featured_image_src":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-content\/uploads\/2025\/02\/20240222_JPR-0199-700x612.jpg","newsletter_img":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-content\/uploads\/2025\/02\/20240222_JPR-0199-aspect-ratio-570-300.jpg","newsletter_date":"20250203","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/182399","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/users\/8"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=182399"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/182399\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/media\/182400"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=182399"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=182399"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/es.gaudiumpress.org\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=182399"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}<\/p>\n