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Beijing (Viernes, 15-08-2014, Gaudium Press) Un grupo de unos 80 jóvenes, entre quienes estaban unos 40 seminaristas, no pudieron viajar a Corea del Sur para tomar parte en la Jornada Asiática de la Juventud a la cual visitó el Santo Padre como parte de su viaje apostólico. Por este motivo no se pudieron ver banderas chinas durante los actos inaugurales del encuentro, si bien se presume que un grupo de jóvenes de Beijing y Hebei consiguieron llegar a Corea, según informó la agencia Asia News.
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| Grupo de peregrinos presentes en el recibimiento oficial del Papa Francisco a su llegada al aeropuerto. Foto: Jeon Han / Republic of Korea. |
El motivo de la cancelación del viaje de los peregrinos fue una decisión de las autoridades que parece estar ligada con el hecho de que los seminaristas que se disponían a viajar se habían negado en julio de 2014 a participar en una eucaristía a la que asistirían obispos ilegítimos. De igual manera, autoridades contactaron a unos doce sacerdotes chinos que ya se encontraban en Corea del Sur para ordenarles que regresaran de inmediato al país.
«A los sacerdotes los llamaron por teléfono funcionarios de la Oficina de Asuntos Religiosos», declaró una fuente reservada a la agencia, «quienes los han amenazado con que tendrían ‘problemas’ si no volvían inmediatamente a su patria». Este tipo de amenazas son frecuentes para los sacerdotes chinos en el extranjero y pueden significar la retención de pasaportes, cancelación de visas futuras y otro tipo de barreras burocráticas para los presbíteros.
Al parecer las autoridades desean evitar cualquier contacto de ciudadanos chinos con el Papa Francisco, al igual que limitar la información sobre la presencia del Santo Padre en Corea. Algunas fuentes refieren la omisión del tema de la visita papal en informativos locales en algunas regiones de China mientras se da un gran despliegue a otros hechos de menor trascendencia.
Con información de Asia News.
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