Menú 
Phoenix (Viernes, 22-01-2016, Gaudium Press) Las reliquias de San Charbel Makhlouf, un Santo libanés ampliamente venerado por su afamado poder de intercesión, fueron veneradas en la parroquia maronia de San José en la ciudad de Phoenix, Estados Unidos, los dáis 15 al 17 de enero. Los actos de veneración, presididos por el Obispo local, Mons. Thomas J. Olmsted, y el Obispo maronita de la Eparquía de Nuestra Señora del Líbano, Mons. Elías Zaidan, hacen parte de la celebración de los 50 años de la beatificación del Santo.
 |
| Mons. Thomas Olmsted presidió la veneración de Santo. Foto: Parroquia Maronita de San José. |
Las reliquias fueron expuestas a la veneración pública durante los tres días de celebración, la cual congregó fieles de todo el Valle de Phoenix, quienes pudieron venerar las reliquias y contemplar otros objetos como libros y medallas del Santo. Las oraciones que se oían en el templo, de acuerdo al informativo diocesano The Catholic Sun, eran una mezcla de árabe, inglés y español debido a la extendida devoción al Santo entre los maronitas – de origen libanés – los fieles locales y los provenientes de países como México donde el Santo ermitaño es ampliamente conocido por los milagros que se le atribuyen.
 |
| Relicario de San Charbel, con el símbolo del cedro, árbol característico de Líbano. Foto: Parroquia Maronita de San José. |
Durante los tres días se celebraron 13 liturgias separadas con dos Eucaristías en español. De hecho, el informativo destaca que el Santuario más grande en honor del Santo además de la tumba del mismo en Líbano es la Basílica de Nuestra Señora de Guanajuato en México, lugar donde los inmigrantes libaneses introdujeron la devoción a inicios del siglo XX.
El P. Bob Rossi, quien celebró la Eucaristía para la comunidad hispana, comentó a The Catholic Sun sus impresiones de la veneración de San Charbel: «Estoy muy feliz de hacerlo porque soy cercano a la comunidad maronita y sé que San Charbel está en el corazón de su espiritualidad. Él ha inspirado a muchas personas hispanas y es un Santo importante para la Iglesia universal y especialmente para los católicos libaneses.
Los feligreses locales reportaron al medio varias historias de curaciones y conversiones atribuidas a la intercesión del Santo y destacaron la importancia de acceder a las reliquias como una gracia especial. «No es frecuente que usted tenga la llegada de estas reliquias. Es una vez en la vida, es histórico», expresó Peter Weingarten, quien peregrinó desde la parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. «Más católicos deberían estar aquí ahora».
Con información de The Catholic Sun.
Deje su Comentario