Menú 
Santiago de Chile (Viernes, 27-05-2016, Gaudium Press) Entre miércoles y jueves se celebró Corpus Christi en todos los campus de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Desde muy temprano funcionarios, alumnos y académicos de la UC trabajaron en la creación de alfombras de aserrín como signo y símbolo de adoración, en las que con diversos colores se dibujaron figuras que representan la Eucaristía y su significado, además de logos de algunas pastorales de carreras, misiones, trabajos y proyectos solidarios de la pastoral de la universidad, para darle un sentido de comunidad a esta fiesta.
La fiesta de Corpus Christi se realizó en los patios de todos los campus, cada uno puso su sello característico y aquello que lo distingue de los demás. En medio de la vida universitaria, hubo un momento para parar y celebrar al cuerpo de Cristo que quiso quedarse en cada campus.
La Misa de Corpus Christi en el campus de San Joaquín fue presidida por el Monseñor Jorge Concha Cayuqueo, Obispo Auxiliar de Santiago. Monseñor comenzó la homilía relacionando esta fiesta con la encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco».
«Hoy la fiesta de Corpus nos recuerda el gran amor de misericordia de Dios que a través de su hijo Jesucristo llegó a nosotros y llegó una vez más pero para quedarse en un modo tan visible, y eso es lo que recordamos en la Eucaristía. La Eucaristía es el punto más agradable que tiene la Iglesia, es el centro de la vida y de la misión de la Iglesia que también es servicio» explicó el Monseñor.
Al finalizar la homilía, se realizó una procesión con el Santísimo Sacramento. Para eso, el Monseñor Jorge Concha portó a Jesús Sacramentado por encima de las coloridas alfombras y todos los presentes adoraron al Santísimo.
La festividad de Corpus Christi
Cada año, la Iglesia nos invita a reafirmar abiertamente la fe del pueblo de Dios en Jesucristo vivo, realmente presente en el Santísimo Sacramento: «Es una fiesta instituida para adorar, alabar y dar públicamente las gracias al Señor, que en el sacramento Eucarístico sigue amándonos ‘hasta el extremo’, hasta el don de su Cuerpo y de su Sangre», dijo el Papa emérito Benedicto XVI en la Solemnidad del 2007.
Esta celebración se realiza todos los años, el jueves después de la Solemnidad de la Santísima Trinidad. En algunos países, como el nuestro, esta fiesta se ha trasladado al domingo siguiente, para adaptarse al calendario laboral.
Por Esperanza Colombo, de la Dirección de Pastoral y Cultura Cristiana de la Universidad Católica de Chile
Deje su Comentario