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Bucaramanga (Martes, 31-05-2016, Gaudium Press) Orando por los cinco continentes, así trascurrió la procesión del Corpus Christi Misionero que se realizó en la ciudad colombiana de Bucaramanga en la noche del pasado sábado 28. El recorrido procesional en honor al Cuerpo y la Sangre de Jesús se desarrolló en el marco del XII Congreso Nacional Misionero que ocurrió del 26 al 29 de mayo con el lema «Somos Iglesia colombiana, en salida misionera» y fue organizado por la Comisión Episcopal de Animación Misionera de la Conferencia episcopal de Colombia (CEC), desde el Departamento de Animación Misionera, en unión con las Obras Misionales Pontificias (OMP) de Colombia y la Arquidiócesis de Bucaramanga.
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| La procesión del Corpus Christi en Bucaramanga estuvo dedicada a las misiones en los cinco continentes / Foto: OMP de Colombia. |
La procesión, que contó con la presencia de los participantes del congreso y de varios fieles de Bucaramanga, se llevó a cabo en una de las vías principales de la ciudad partiendo desde el coliseo del colegio la Presentación hasta la parroquia San Pio X, siendo animada por varias realidades eclesiales, entre ellas la infancia misionera, la Pastoral Juvenil, Emaús, el Camino Neocatecumenal y Lazos de Amor Mariano.
Durante el recorrido con el Santísimo Sacramento se pidió por las misiones en los cinco continentes y también por el continente digital, donde también hay que llevar el Evangelio, como invitó el Arzobispo de Bucaramanga, Mons. Ismael Rueda Sierra, quien presidió la fiesta del Corpus Christi.
El Congreso, que fue inaugurado por el Cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos (Ver noticia: Cardenal Filoni inaugura el 12º Congreso Nacional Misionero en Colombia), se clausuró el pasado domingo 29 con una solemne Eucaristía que presidió Mons. Luis Augusto Castro Quiroga, Presidente del Episcopado Colombiano.
Durante la homilía se refirió al Cuerpo y la Sangre de Cristo, recordando que en la Eucaristía se celebra su presencia real: «Aquí no hablamos de una presencia simbólica, sino de una presencia real del Señor en la Eucaristía. Y es también una presencia oblativa, que significa de entrega: ‘Este es mi Cuerpo que se entrega por ustedes'». Señaló igualmente que la Iglesia es presencia de Cristo y que Jesús está presente en el necesitado.
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| El Congreso reunió a cientos de personas peretenecientes a diversas realidades misioneras de Colombia / Foto: OMP de Colombia. |
En otro momento dijo que el Congreso es ocasión para motivar a todos a multiplicar la fe, «porque hay muchos pueblos donde no se conoce a Jesucristo, hay muchos pueblos donde no se tiene idea de que Jesucristo está al lado de ellos, y esto hay que hacérselo entender».
Sobre lo cual añadió: «Para eso es nuestra tarea; una tarea que no es simplemente de llevar palabras, sino también llevar testimonio (…), porque el testimonio hoy por hoy impacta de una manera maravillosa (…) El que encuentra a Jesús y lo anuncia con su manera de vivir, en su manera de actuar y con su manera de hablar (…)».
En este sentido alentó para que «vuelva a brotar la fe donde antes la había y que empiece a surgir por primera vez donde no hay».
Finalmente exhortó a las realidades misioneras a ser testigos de verdad y estar dispuestos «a anunciar a Jesucristo en todo el mundo, más allá de las fronteras de la fe, para que Jesucristo verdaderamente sea conocido, amado y seguido, y para que nosotros podamos cumplir con aquel mandato de ir por todo el mundo y hacer discípulos de todos los pueblos».
Al concluir la Misa, el Presidente de la CEC consagró a todos los participantes del Congreso a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, Patrona de Colombia.
Con información de las OMP de Colombia.
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