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Washington (Sábado, 05-10-2013, Gaudium Press) La religiosa Mary Ann Walsh, directora de la Oficina de Relación con los Medios de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, publicó el pasado 04 de octubre un artículo en el que destaca su aprecio personal por el Santo Rosario. El texto, que aparece en el blog oficial de dicho departamento, recuerda la versatilidad de la tradicional oración a la Santísima Virgen.
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| El Santo Rosario es la oración ideal para la agitada vida cotidiana de nuestrta época. Foto: Lawrence OP. |
«Aquí quisiera levantar mi voz en aprecio al Rosario», afirmó la religiosa, quien afirmó que es la práctica devota apropiada para «cuando nos sentimos confundidos y estresados, cuando estamos esperando en la oficina del doctor, conduciendo de ida y vuelta al trabajo, demasiado distraídos para meditar, solos en la gran ciudad o sentados al lado de un moribundo e, incluso, cuando estamos a solas».
Según la directora de Relación con los Medios de la USCCB, rezar el Santo Rosario le permite cumplirle a las personas que se encomiendan a sus oraciones y «hacer algo más que decir «Dios, bendice a quienes yo les dije que iba a rezar por ellos»», afirmó. Las intenciones que puede encomendar a la Santísima Virgen son tan variadas como los múltiples aspectos de la vida cotidiana. La religiosa ora por sus sobrinos, sus colegas, los jóvenes, las mujeres embarazadas y sus hijos. Ante el intenso tráfico vehicular de Washington, «rezo para contrarrestar la conducta agresiva de los que manejan. Es mejor decir en voz alta «Santa María, Madre de Dios» que decir algo lamentable que quizás uno necesite confesar más adelante», recordó con humor.
El beneficio de los Misterios del Rosario
La Hermana Walsh también destacó la enseñanza que aporta la meditación frecuente de los misterios del Santo Rosario. Por ejemplo, cuando contempla la Visitación en los Misterios Gozosos, «me voy en un viaje espiritual hacia la persona que me necesite y, como una especie de telepatía, les digo «No te rindas». En la Presentación del Señor, ora pro las familias y recuerda a los padres de familia que se acercan a comulgar con sus hijos en brazos, a quienes el sacerdote bendice.
«En los Misterios Dolorosos, uno tiene que darse ánimo y enfrentarlos en oración», comentó la religiosa. La dureza de la Pasión de Cristo inspira y alienta a ofrecer el sacrificio de la propia vida a Cristo. «El cargar la cruz es familiar para aquellas personas que están enfrentando desafíos en su vida, por ejemplo, cuidando a padres ya ancianos o a un hijo con una enfermedad crónica, o lidiando con una situación difícil en el trabajo. Eso ayuda a unir el dolor que uno siente con el de Jesús».
Para la Hna. Walsh, los Misterios Gloriosos son uan celebración los momentos maravillosos de la fe. «Mi favorito es la Venida del Espíritu Santo. Trato de imaginarme que estoy metida entre los apóstoles para que el Espíritu descienda sobre mí y me ayude a tomar decisiones sensatas», expresó, al tiempo que sugirió que es es un ejercicio cada vez más necesario. «Cuando yo era joven, esto significaba elegir la respuesta correcta en un examen, pero ahora… » Finalmente la religiosa refirió la alegre sorpresa que sintió cuando el Beato Juan Pablo II instituyó los Misterios Luminosos sobre la vida pública de Jesús.
Para ella, la oración que nació como un recurso de las personas sencillas e iletradas, principalmente campesinos, para alabar a Dios, ilumina la vida de quienes han cambiado la vida simple por «una existencia agitada y llena de distracciones, donde a veces se nos hace difícil hasta pensar», concluyó. «Esta es una razón más para que el Rosario, que nos conmueve más allá de las palabras, más allá de los pensamientos, hacia la presencia de Dios, aún tenga un lugar en nuestras vidas».
Con información de USCCBlog.
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