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Mumbai (Viernes, 24-01-2014, Gaudium Press) El Cardenal Oswald Gracias, Presidente de la Conferencia Episcopal de India, recibió un detallado informe sobre la violencia contra los cristianos en el país durante 2013, elaborado por la Organización Catholic Secular Forum y otras organizaciones cristianas. El documento revela la cifra de cuatro mil incidentes de violencia anticristiana, entre los cuales se encuentran siete asesinatos, uno de ellos cometido contra un menor de edad.
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| Represión de las autoridades a una manifestación de católicos en favor de los cristianos dalit el 11 diciembre de 2013. En esa ocasión sacerdotes y religiosas resultaron agredidos y el Arzobispo de Nueva Delhi, Mons. Anil Coutto, fue detenido temporalmente. Foto: CMPaul. |
Otros graves hechos incluyen ataques en los que resultaron afectados en total cerca de 500 niños, según información divulgada por la agencia Fides. También se contabilizan cerca de mil mujeres víctimas, quienes han padecido abusos y golpizas, además de ataques a unos 400 sacerdotes de varias confesiones y 100 lugares de culto cristiano.
Los estados más afectados por estas violaciones al derecho fundamental a la libertad religiosa son según el documento Karnataka y Maharashtra. Este último fue descrito como el que parece «el próximo laboratorio de extremismo hindú». Otros estados que registran un mayor número hechos de persecución son Andhra Pradesh, Chhattisgarh, Gujarat, Orissa, Madhya Pradesh, Tamil Nadu y Kerala.
El informe también denunció problemas estructurales en el marco legal indio, que permite la creación de leyes anti conversión (vigentes aún en los estados de Orissa, Arunachal Pradesh, Madhya Pradesh, Rajasthan, Gujarat, Chhattisgarh e Himachal Pradesh) o la discriminación de comunidades como la de los dalit cristianos.
También se puso en evidencia la carencia de leyes que detengan la violencia y eviten la impunidad de quienes persiguen a los cristianos. Además, según el informe, en la mayoría de los casos existe negligencia por parte de las autoridades y otros sectores, ya que «la policía se niega a registrar las denuncias» y los medios de comunicación omiten las informaciones o minimizan su importancia.
Con información de Agencia Fides.
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