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Curó al rey, cuando los médicos ya lo habían deshauciado.
Redacción (28/05/2021 09:18, Gaudium Press) San Germán nace en Autun en el año 496. Después de una eximia educación es ordenado sacerdote por San Agripino, obispo de esa ciudad.
Fue abad del convento de San Sinforiano.
Estaba en París cuando la sede quedó vacante, y por ello el rey Childeberto le hizo obispo de esa diócesis.
Pero aunque obispo de París siguió siendo llevando las costumbres de monje. Invitaba a su mesa a los mendigos.
Un día el rey enfermó, al punto que los médicos lo deshauciaron. Pero San Germán pasó la noche junto al enfermo, en oración, y se curó. La acción del santo terminó fortaleciendo la virtud del rey, y de muchos pecadores. En agradecimiento por su curación, el rey cedió al obispo y su diócesis el territorio de Celles, en el que había ocurrido la curación.
San Germán luchó por reprimir el libertinaje de los nobles, y también llegó a excomulgar al rey Chariberto por conducta licenciosa. Luchó por reunir a las facciones en pugna de los sobrinos de Chidelberto.
San Germán murió el 28 de mayo del 576, cuando tenía 80 años, y se dice que fue el propio rey Chilperico quien compuso su epitafio, un elogio de su ser.
Con información de El Testigo Fiel
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