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El debate sobre el aborto en los Estados Unidos está alcanzando ribetes de una agresividad y violencia nunca vistos.
Foto: Ian Hutchinson en Unplash
Redacción (09/06/2022 15:48, Gaudium Press) El debate sobre el aborto en los Estados Unidos está alcanzando ribetes de una agresividad y violencia nunca vistos.
Ayer Aciprensa daba cuenta del arresto de Nicholas John Roske, quien afirmó que había viajado desde California hasta el condado de Montgomery, donde vive el juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh, para matarlo. El hombre tenía una pistola y un cuchillo.
El móvil que llevaría Roske al crimen, según fuentes del Washington Post, sería la opinión del juez en un caso en el que el fallo de la Corte Suprema revertiría la sentencia Roe vs. Wade, que abrió las puertas al aborto en los EE.UU.
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Aciprensa informaba también ayer el ataque al centro provida CompassCare Pregnancy Services, de Buffalo, cuyo edificio fue incendiado en la noche del 6 de julio pasado por activistas pro aborto. La policía y bomberos respondieron rápidamente a los llamados de auxilio y por esto los daños no fueron catastróficos.
Los atacantes de este centro provida pintaron un grafitti que decía “Jane estuvo aquí”, presumiblemente aludiendo al grupo abortista Jane’s Revenge.
Estos ataques se dan en las cercanías del fallo del Caso Dobbs vs. Jackson, que sería favorable a la prohibición del aborto después de la 15ª semana de gestación, y que implicaría en la práctica una revocación del fallo Roe vs. Wade de 1973.
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