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Dijo que ya había firmado su renuncia en caso de impedimento por salud. Que es muy amigo del Opus. Habló sobre ‘indietrismo’, Iglesia alemana, Lula.
Redacción (19/12/2022 16:48, Gaudium Press) De la muy amplia entrevista concedida por Francisco a los periodistas de ABC España, Javier Martínez-Brocal y Julián Quirós, destacamos aquí algunos apartes.
Tal vez el más sonado, inédito, es la declaración de Francisco de que “ya he firmado mi renuncia. Era Tarcisio Bertone el secretario de Estado. Yo la firmé y le dije: «En caso de impedimento por cuestiones médicas o qué sé yo, acá está mi renuncia. Ya la tienen». No sé a quién se la habrá dado el cardenal Bertone, pero se la di cuando era secretario de Estado”. Francisco ratifica que Pablo VI ya había hecho eso, y cree que también Pío XII.
Los periodistas preguntaron a Francisco que tras diez años de pontificado, algunos afirman “que ha puesto mucho acento en los desfavorecidos, por así decirlo, mientras los sectores más tradicionales sienten cierta incomprensión”. A esto responde el Papa que “el problema no es la tradición. La tradición es la fuente de inspiración. La tradición son nuestras raíces que te hacen crecer y van andando y creciendo y te hacen crecer en vertical. El problema es andar hacia atrás”. “En italiano lo llamo ‘indietrismo’: «No, mejor estar como se hacía antes», «es más seguro», «no arriesgues». Ese marchar hacia atrás”, expresa.
Sobre el estatuto del Papa emérito, algo que cobró alta importancia tras la renuncia de Benedicto, afirmó el Pontífice que “no lo toqué para nada, ni me vino la idea de hacerlo. Será que el Espíritu Santo no tiene interés en que me ocupe de esas cosas”.
El doloroso capítulo de los abusos sexuales
Acerca de los encuentros que tanto Benedicto XVI como él mismo han tenido con personas abusadas sexualmente por miembros del clero, Francisco dijo que “es muy doloroso, muy doloroso. Son personas destruidas por quien tenía que haberlas ayudado a madurar y a crecer. (…) es monstruoso que la persona que te tiene que llevar a Dios te destruya en el camino. Y sobre esto no hay negociación posible”.
Sobre qué consejo le daría a un sucesor, particularmente para enfrentar ciertas decisiones, “les diría que no hagan los errores que yo hice, punto y nada más”.
Al respecto de recientes medidas tomadas sobre el Opus Dei, como por ejemplo colocar la prelatura bajo la custodia de la Congregación para el Clero cuando estaba bajo la Congregación de Obispos, el que el prelado ya no sea obispo, o la exigencia de un informe anual de actividades y que casi de hecho la obra fuese convertida en un instituto de vida consagrada más, Francisco afirmó que “se estudió la cosa y se dijo ‘que vaya la prelatura a la Congregación del Clero’. Lo hice dialogando con ellos. Además, soy amigo desde la Argentina de Mariano Fazio (Vicario general de Opus Dei). Ha sido una cosa serena y normal hecha por canonistas, trabajaron incluso canonistas del Opus en el proceso. (…) Es una re-ubicación que había que resolver”.
Revisión de estructuras de los seminarios
Sobre la “investigación” que ordenó de los seminarios de España, Francisco afirmó que “no es una investigación. Es una visita normal que realiza la Congregación del Clero para ver cómo hacen las cosas, con ánimo de ayudar siempre, no de inspeccionar para jorobar. No es el único país donde se ha hecho. Probablemente se hace por el pedido de algunos obispos, no sé. La realizan dos uruguayos que valen oro, de lo mejorcito de América Latina”.
Manifestó que los asuntos a revisar en estos seminarios son cuestiones de estructura. “Por ejemplo, si son tres chicos, eso no es un seminario. Un seminario tiene que tener un número mínimo y un número máximo de seminaristas… Tienen que tener una disciplina, etc.”
Acerca del sínodo de la sinodalidad, el Papa afirmó que “un sínodo no es una encuesta de opinión, no es una ‘interview’ a la gente, no es un parlamento. El protagonista es el Espíritu Santo, y si Él no está, no hay sínodo”.
Al preguntarle sus sentimientos sobre la situación de la Iglesia Católica en Alemania, afirmó que “no me quita la paz. Yo les escribí una carta clara. La escribí solo. Un mes me llevó. Fue una carta como diciendo ‘reflexionen, hermanos’”.
Sobre el proceso jurídico que se hizo a Lula da Silva en Brasil, en el que primero fue condenado pero finalmente fue anulado, dijo Francisco que “no da la impresión de que hubiera sido un proceso de nivel. Y en eso, cuidado con los que arman el ambiente para un proceso sea el que sea. Te lo arman a través de los medios de comunicación de tal manera que van incidiendo sobre los que tiene que tomar el juicio y decidir. Un juicio tiene que ser lo más limpio posible, con tribunales de primera categoría, que no tengan ningún interés, más que el salvar la limpieza de la justicia. Este caso de Brasil es histórico, no me meto en plítica. cuento lo que pasó.”
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