Solo una diócesis en Nigeria ya sobrepasó los 400 sacerdotes

Se trata de la diócesis de Nsukka, en Nigeria, superó los 400, tras la ordenación de 23 nuevos presbíteros el 10 de agosto.

Foto: Emmanuel Ikwuegbu en Unplash

Redacción (14/08/2024, Gaudium Press) El número de sacerdotes que sirven en la diócesis de Nsukka, en Nigeria, superó los 400, tras la ordenación de 23 nuevos presbíteros el 10 de agosto.

En declaraciones al final de la ordenación, el obispo Godfrey Igwebuike Onah expresó gratitud y alegría por el creciente número de sacerdotes que sirven en su diócesis.

“Debo presentar una disculpa a todos los sacerdotes de Nsukka que no están en este santuario. Con la ordenación de hoy, somos 417 sacerdotes en esta diócesis”, dijo Monseñor Onah durante la misa en la Catedral de Santa Teresa. “Ahora entienden por qué algunos de ustedes durante los últimos 10 años no han podido imponer las manos a sus hermanos recién ordenados, porque si todos impusiéramos las manos, todavía estaríamos [haciéndolo]”.

“Pero en el futuro encontraremos una manera de permitir que el mayor número posible de ustedes ejerzan ese gesto”, dijo el obispo.

En su homilía, Mons. Onah advirtió sobre el uso de plataformas de redes sociales en el ministerio de un sacerdote.

“Hay ciertos lugares que los sacerdotes deben evitar, ciertos sitios web que no deben visitar, ciertas aplicaciones que no deben descargar y ciertas redes con las que no deben interactuar. Incluso su vestimenta debe reflejar su llamado sagrado”, dijo.

“Como sacerdotes, deben discernir adónde van y qué hacen. Deben recordar que son vasijas de barro que contienen un tesoro precioso y deben guardarlo cuidadosamente”, añadió el obispo.

Monseñor Onah reiteró la importancia de que los sacerdotes vivan vidas que reflejen su llamado sagrado, no solo en su ministerio, sino también en todos los aspectos de su comportamiento.

“Los sacerdotes están llamados a permanecer entre el pueblo y Dios, a ofrecer oraciones en nombre de la Iglesia y a transmitir el mensaje de Dios al pueblo. Si bien la tentación de los sacerdotes de convertirse en activistas es grande, su verdadero llamado es ser hombres de oración, guiando a los fieles en la santidad”, dijo el prelado.

Destacó además el contexto global de su llamado, recordando a los 23 nuevos sacerdotes, que pertenecen no solo a su diócesis local sino a la Iglesia Católica en el mundo.

“Aunque cada sacerdote es ordenado para una determinada diócesis o instituto religioso, cada sacerdote pertenece a la Iglesia católica y al mundo entero. A partir de este momento sus ideas, intereses y carismas personales serán puestos al servicio de la palabra de Dios”, dijo.

Con información de CNA.