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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 17-10-2018, Gaudium Press) En este conturbado año de 2018, por ocasión de la Fiesta de la Patrona del Brasil, Nuestra Señora Aparecida, lo que el Papa dijo a los brasileños fueron palabras breves y simples, pero entusiasmantes.
Fueron palabras dichas por quien se encontraba en medio a trabajos, muchos trabajos, y pedidas por alguien que no olvidó a su pueblo.
Estando en Roma, participando del Sínodo Episcopal, el Obispo brasileño de la ciudad de Emperatriz, Mons. Vilsom Basso, y el joven Lucas Galhardo, que es de la Pastoral Juvenil de la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil (CNBB) y forma parte de la delegación de jóvenes que allí representan al Brasil, consiguieron un espacio audaz.
En uno de los intervalos los dos consiguieron aproximarse al Papa Francisco y pedirle algunas palabras para ser transmitidas a los brasileños por la reciente ocasión del día de la Patrona, Madre y Reina del Brasil, Nuestra Señora de la Concepción Aparecida.
Más como devotos que como periodistas, los dos participantes de la Asamblea del Sínodo consiguieron grabar el corto mensaje del Papa Francisco para el pueblo brasileño, en medio a los trabajos del Sínodo de los Obispos sobre los jóvenes:
«Al pueblo de Brasil, mi cordial saludo en esta fiesta de Nuestra Señora Aparecida. Que cada uno de ustedes la encuentre en su corazón, así como los pescadores la encontraron en el río. Busquen en las aguas de sus corazones y la encontrarán, porque Ella es madre. Que Ella nos acompañe y recen por mí.» (JSG)
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