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Ciudad del Vaticano (Jueves, 05-10-2017, Gaudium Press) La Fundación Vaticana Joseph Ratzinger – Benedicto XVI publicó el texto del prefacio redactado por el Papa emérito para la edición en lengua rusa del Volumen XI de sus obras completas, dedicadas al tema de la Teología de la Liturgia. El volumen será presentado en Moscú en la primavera de 2018 y será seguido por la edición en ruso de la trilogía de obras del Pontífice sobre Jesús de Nazareth.
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| Benedicto XVI, durante el homnaje en su honor en su cumpleaños número 90. Foto: Ratzinger Foundation |
«Nihil Operi Dei praeponatur – Nada se anteponga al Culto Divino», inicia el prefacio Benedicto XVI. La frase de San Benito en su Regla establece la prioridad que para los religiosos tiene la Liturgia, por encima de cualquier preocupación cotidiana. El Santo ordenó a los monjes dejar de lado las labores terrenales para dar su debido tiempo a las celestiales: «En el momento del Oficio Divino, tan pronto se escuche la señal, dejen todo lo que tengan en las manos y acúdase con la máxima solicitud».
En contraste con esta disposición del Patrono de Europa, «en la conciencia de la gente de hoy, las cosas de Dios y por tanto la Liturgia no parecen urgentes para nada», se lamentó el Papa emérito. «Hay una urgente necesidad para toda las cosas posibles. Las cosas de Dios no parecen ser urgentes». Si bien la vida secular de los fieles es distinta de la de los monjes, «la prioridad de Dios que olvidamos es válida para todos. Si Dios no es importante, cambiamos los criterios para establecer lo que es importante».
Según Benedicto XVI, la mala interpretación de la reforma litúrgica posterior al Concilio Vaticano II llevó a muchos a poner en primer plano «el aspecto de la educación y de la propia actividad y creatividad» e incluso hizo que «los hombres casi olviden la presencia de Dios», una situación que pone en riesgo a la Iglesia misma. «La Iglesia está en peligro cuando la primacía de Dios no aparece en la liturgia y por tanto en la vida».
«La causa más profunda de la crisis que ha sacudido a la Iglesia está en el oscurecimiento de la prioridad de Dios en la Liturgia. Todo esto me ha llevado a dedicarme al tema de la Liturgia más que en el pasado porque sabía que la verdadera renovación de la Liturgia es una condición fundamental para la renovación de la Iglesia», concluyó el Pontífice emérito. «Espero que este libro pueda ayudar a los cristianos de Rusia a entender de una forma nueva y mejor el gran regalo que se nos ha donado en la Sagrada Liturgia».
Con información de Fundación Ratzinger.
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