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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 27-03-2019, Gaudium Press) En la Audiencia General de hoy, tenida en la Plaza de San Pedro, el Pontífice otorgó la condecoración Pro Ecclesia et Pontifice a la Hermana María Concetta Esu, de las Hijas de San José de Genoni, misionera de 85 años, y quien desde hace 60 ejerce su ministerio en África, particularmente de partera.
La Hermana María Concetta ha ayudado a nacer a cerca de 3.000 niños.
«Queridos hermanos y hermanas, tenemos hoy la alegría de tener entre nosotros a una persona que deseo presentarles. Se trata de María Concetta Esu, de la Congregación de las Hijas de San José de Genoni. (…) Yo la encontré en Bangui, cuando fui a abrir el Jubileo de la Misericordia. Ella me contó que en el curso de su vida había ayudado a nacer a cerca de 3.000 niños. ¡Qué maravilla!», dijo el Papa.
El Pontífice narró que la religiosa había viajado entonces a Bangui desde el Congo, en barca. Y que ahora se encuentra en Roma para participar de la Audiencia General con su superiora.
Al condecorarla, Francisco quiso hacer visible la señal de su afecto «y de nuestra gratitud por todo el trabajo que usted ha hecho en medio de sus hermanos y hermanas africanos, al servicio de la vida de los niños, las mamás y las familias. A través de este gesto, deseo también hacer parte de mi reconocimiento a todos los misioneros, sean ellos sacerdotes, religiosos o religiosas, y laicos, que difunden la semilla del Reino de Dios por todo el mundo. Queridos misioneros, ¡vosotros hacéis un trabajo enorme!», exclamó el Papa.
La misionera, emocionada, besó las manos del Pontífice, y le agradeció. Después el Papa saludó a algunas de sus hermanas en religión, y bendijo a la Hermana María colocando su mano sobre su cabeza.
Ya en diciembre de 2015, Francisco había elogiado la entrega de María Concetta. «Esto es como son los misioneros: corajudos», había dicho. Personas que «queman sus vidas para proclamar a Jesucristo. Es bello ver esto».
Con información de CNS
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