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Una paloma… ¿por qué?

Redacción (Miércoles, 18-02-2015, Gaudium Press) «Después de ser bautizado, Jesús salió luego del agua, y el cielo se abrió. Y Él vio el Espíritu de Dios bajar, como una paloma, y venir sobre Él». El texto sagrado es clarísimo, y el Espírito de Dios vino en forma de paloma. Aún así, todavía resta una duda: ¿Por qué una paloma? ¿No sería mejor una golondrina, o un águila?

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La razón por la cual el Espíritu Santo apareció en forma de paloma y no de otro animal, es explicada por Santo Tomás [1] con su característica simplicidad:

1º Todo aquel que desea ser bautizado no puede ansiar ese sacramento de manera fingida y superficial, sino de modo simple, como la paloma, que es un animal sin «interés propio». Y por eso el evangelista San Mateo aconseja: «Sed simples como las palomas». (Mt 10, 16)

2º A través del Bautismo el hombre posee los siete dones del Espíritu Santo, los cuales están simbolizados en la Paloma, pues:

a. Esta ave vive junto a las corrientes de agua, por la razón de que cuando viene el gavilán puede escapar sumergiéndose. Esto se relaciona con el don de la sabiduría, porque los santos viven junto a las corrientes de las Sagradas Escrituras, con el objetivo de escapar de las tramas del demonio.
b. La paloma escoge los mejores granos para su alimento, lo que se relaciona con el don de ciencia, con lo cual quien la posee escoge las mejores opiniones para alimento de su vida espiritual.
c. Este amable animal alimenta a los hijos ajenos. Don de consejo, con el cual se busca alimentar a aquellos que están alejándose de Dios o ya cayeron en el pecado.
d. La paloma no despedaza su pico, lo que se relaciona con el don de inteligencia. Aquellos que lo poseen no pervierten las buenas opiniones, dilacerándolas como hacen los herejes.
e. Esta ave no tiene hiel. Don de piedad, el cual libra al hombre de la ira.
f. Este astuto animal hace su nido en lo alto de las rocas. Don de la Fortaleza, los fuertes tienen su refugio en aquello que es más sólido y más alto, en Dios.
g. La paloma arrulla, en vez de cantar como otros pájaros. Don de temor: donde se tiene placer en llorar las propias miserias, por amor a Dios.

Y aquí están simbolizados en este simple animal los siete dones del Espíritu Santo.

3º Para simbolizar el efecto propio del sacramento del Bautismo: la remisión de los pecados y la reconciliación con Dios.

4º Con el fin de significar el efecto general del Bautismo, la construcción de la unidad de la Iglesia. Pues la paloma es un animal que siempre está en bandos, o sea, busca siempre la unidad.

Y además de todas estas razones, hay una que se relaciona con la perpetuidad del sacramento del Bautismo. Como explica San Juan Crisóstomo [2], siempre en el comienzo de las experiencias espirituales aparecen señales sensibles, por causa de aquellos que tienen más dificultad de entender lo sobrenatural. O sea, Dios quiso hacerse visible, en forma corporal de paloma sobre Cristo, con el fin de que posteriormente todos creyeran que Él descendería invisiblemente sobre todos aquellos que fuesen bautizados.

Y, continúa San Juan Crisóstomo, también porque este animal apareció en el diluvio, llevando un ramo de olivo y anunciando la buena nueva de paz sobre la tierra. Pues, cuando las cosas habían llegado a un estado de desesperación, el Señor trae la solución y el remedio. En aquella época, Dios obró por medio de un severo castigo. Ahora, a través de la Gracia y de sus dones sobrenaturales. Y por eso ahora aparece la paloma, no trayendo un ramo de olivo en el pico, pero si para señalar que venía para librar a los hombres de todos los males y para garantizarnos las más bellas esperanzas. Esa paloma no venía a sacar solamente al hombre del Arca, sino a levantar al cielo la tierra entera, y en vez de traer el ramo de olivo en el pico, trajo para todo el género humano la filiación divina.

Luan Felipe de Souza
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[1] AQUINO, Tomás de. Suma Teológica. III- q.39. a.6. p.573.
[2]CRISÓSTOMO, Juan. «Obras de San Juan Crisóstomo: Homilías sobre San Mateo,1-45. BAC: Madrid, 2007.p.226.

 

 

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