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Jolo (Lunes, 28-01-2019, Gaudium Press) Dos terroristas suicidas atacaron la Catedral de Jolo, en Filipinas, durante una Eucaristía matutina el pasado 27 de enero, haciendo estallar explosivos dentro del templo y en estacionamiento aledaño. Las cifras oficiales de víctimas son de cinco soldados, un guardia costero y 12 civiles fallecidos y 83 heridos. El acto mereció «la más firme reprobación» por parte del Papa Francisco y el rechazo decidido de la Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas.
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| El ataque ocasionó la muerte de 18 personas según las autoridades, aunque los reportes de prensa ubicaban la cifra en más de 27 víctimas. Foto: AsiaNews. |
El Pontífice se refirió a la tragedia en su último día de permanencia en Panamá, donde se celebró la Jornada Mundial de la Juventud 2019, y pidió al Señor que «convierta los corazones de los violentos y le conceda a los habitantes de esa región una coexistencia pacífica. Por su parte, los prelados de Filipinas indicaron que recibieron las «tristes noticias» del atentado mientras se encontraban reunidos en su Asamblea Plenaria en Manila.
«Expresamos nuestras condolencias a las familias de los numerosos soldados y civiles asesinados por las explosiones. Asimismo, expresamos nuestras condolencias a aquellos que resultaron heridos y extendemos nuestra solidaridad a los demás fieles que se encontraban en la Catedral así como al resto de la comunidad eclesial en la vicaría apostólica de Jolo», comentaron los Obispos, quienes recordaron que el acto terrorista se registró a pocas horas de un plebiscito en el cual se decidió la creación de la Región Autónoma Bangsamoro en el Mindanao musulmán. La única provincia en votar en contra de la iniciativa fue Sulu, cuya capital es Jolo.
La creación de la región autónoma pretende aliviar la situación de violencia que se expresó de manera clara en la toma de Marawi, también en el sur de Filipinas, y que causó la destrucción de la Catedral a manos de los extremistas y el desplazamiento de más de 230 mil personas. Los Obispos católicos hicieron un llamamiento a la unidad de todas las comunidades presentes en la región «en la defensa contra el extremismo violento».
El nuevo Arzobispo de Cotabato y anterior Obispo de Jolo, Mons. Angelito Rendon Lampon, comentó sobre la persistencia de las amenazas a la comunidad católica local a través de los años. «En mis 20 años (de apostolado), desde 1998 hasta la semana pasada, lanzaron siete granadas contra nuestra Catedral», recordó el prelado.
Con información de AsiaNews y Vatican News.
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