Obispos católicos de Illinois, EEUU, reiteran su oposición a la legalización de la marihuana

Chicago (Martes, 05-02-2019, Gaudium Press) La Conferencia Católica de Illinois, que agrupa a todos los Obispos de ese estado de los Estados unidos, emitió una declaración sobre la oposición de la Iglesia a la legalización de la marihuana, en relación a un proyecto de ley que permitiría su uso recreacional. Los prelados de las seis Diócesis locales recordaron los graves males que genera el consumo de drogas e insistieron sobre la necesidad de restringir el consumo de estupefacientes en favor del bien común de la sociedad.

El bien común de los ciudadanos de Illinois pasa por la protección de sus habitantes de los peligros de la drogas.

«La información recopilada por los organismos gubernamentales y grupos de interés público registran que el consumo de drogas está desenfrenado en la sociedad moderna», comentaron los prelados. «Hace algunos años, escuchábamos muchas historias de niños que se quedaron huérfanos luego de que sus padres sufrieron una sobredosis de heroína. Hoy en día, escuchamos sobre la crisis por consumo de opioides y las vidas que cobra. Si se legaliza la marihuana, sólo se agrava el problema».

Los Obispos desmintieron argumentos como el de suponer que la marihuana no es adictiva, que es refutado por una investigación revisada. Los investigadores «indican que la mayoría de las personas que son adictas a otras drogas comenzaron con el consumo de alcohol y marihuana». Frente al argumento de que la penalización del consumo y tenencia de la droga facilita la discriminación racial en las prisiones, recordaron las reformas recientes a las sentencias penales que permiten el pago de fianzas y que hacen innecesaria una legalización para atender este problema.

Finalmente, los Obispos recordaron que ya existen en Illinois dispensarios de marihuana para uso medicinal y alertaron que estos se transformarán en «tiendas minoristas para clientes de 21 años o más». En lugar de esperar que una eventual legalización acabe con el mercado negro de la droga, los prelados cuestionaron si en su lugar «el mercado negro solo venderá marihuana a un menor precio y a menores de edad», lo que significaría un mayor fracaso de la iniciativa.

«Mientras los legisladores consideran este tema, es importante recordar que no sólo se debate la legalización de la marihuana, sino también la comercialización de una droga en una industria de la cual el estado se beneficiará», alertaron los Obispos. «Al buscar el bien común, el estado debe proteger a sus ciudadanos». Los Obispos reiteraron su llamado a los legisladores a negarse a la legalización de la marihuana y en su lugar afirmar la promoción de la vida, la solidaridad, la educación y el trabajo. «Si decimos ‘sí’ a todas esas cosas, no habrá espacio para las drogas ilícitas, el abuso del alcohol ni para otras formas de adicción», afirmaron, citando las palabras del Papa Francisco en 2014.

Con información de Conferencia Católica de Illinois.