"La santidad es la primera necesidad de la Iglesia y del mundo en esta hora crucial": Arzobispo de Sevilla

Sevilla (Lunes, 11-02-2019, Gaudium Press) Un llamado urgente a vivir la vocación a la santidad es el que ha hecho el Arzobispo de Sevilla, Mons. Juan José Asenjo Pelegrina, en su más reciente carta pastoral, publicada en la web de la Archidiócesis de Sevilla. En ella, el prelado hace eco de la exhortación apostólica ‘Gaudete et Exultate’ del Papa Francisco sobre la santidad, y el capítulo sobre este tema que se abordó en la constitución ‘Lumen Gentium’, documento del Concilio Vaticano II, señalando:

«Siguiendo la huella del Concilio, la exhortación apostólica quiere ser un aldabonazo que nos recuerda a los cristianos de hoy, tal vez demasiado adormecidos e instalados en un cierto aburguesamiento espiritual, nuestra vocación más profunda. El Papa nos recuerda la palabra intemporal de Jesucristo: ‘Sed santos, como el Padre celestial es santo’ (Mt 5,48). Nos recuerda también el consejo de san Pablo: ‘Esta es la voluntad de Dios, vuestra santificación’ (1 Tes 4,3)».

Mons. Juan José Asenjo inaugurando la muestra «Llamados a la santidad», presentada durante octubre pasado en Sevilla / Foto: Archidiócesis de Sevilla.

De ahí Mons. Asenjo Pelegrina afirma que «la santidad es la primera necesidad de la Iglesia y del mundo en esta hora crucial», y toma palabras del Papa Benedicto XVI, quien escribió: «Los santos son los verdaderos reformadores (…) Sólo de los santos, sólo Dios, proviene la verdadera revolución, el cambio decisivo del mundo».

Refiriéndose a la crisis moral de hoy, que ha llevado a la sociedad a la angustia y a la desesperanza, el Arzobispo de Sevilla dice de modo contundente: «El momento histórico que nos ha tocado vivir necesita cristianos santos (…) ante este situación no existe otro antídoto que la santidad».

«Nuestro mundo, herido por la injusticia y la desesperanza, desequilibrado por el egoísmo, la violencia, el hambre y las desigualdades terribles entre el hemisferio norte y el hemisferio sur, no curará sus heridas desde las soluciones o las recetas que le brinden los sociólogos, los técnicos o los políticos, ni desde el mero servicio asistencial, soluciones que en ningún caso sanan el corazón del hombre, sino desde la revolución silenciosa de la santidad y del amor», continúa el prelado.

Esta es la razón que llama a recordar al obispos español que la santidad «es obligación de todos los bautizados», siendo en primer lugar de los sacerdotes y consagrados, pero también de los laicos.

«La Iglesia y el mundo necesitan santos, santos en la vida ordinaria, héroes de lo pequeño, santos de lo sencillo, santos de lo cotidiano, hombres y mujeres, jóvenes y adultos, padres y madres de familia, que encuentran su camino de santificación en la oración, en la participación en los sacramentos, en la profesión, la educación de sus hijos, la identificación de la propia voluntad con el querer de Dios, y en la ofrenda de la propia vida, abierta a las necesidades de los que sufren y comprometida en el apostolado y en la construcción de la nueva civilización el amor», convoca Mons. Asenjo.

Concluyendo la carta pastoral, el Arzobispo alienta a los fieles recordándoles que la santidad no es imposible, ya que Jesusito, quien ha llamado a ella, «nos capacita con la fuerza del Espíritu para responder».

Cierra el documento, tomando palabras del Papa Francisco: «No tengas miedo de la santidad. No te quitará fuerzas, vida o alegría. Todo lo contrario, porque llegarás a ser lo que el Padre pensó cuando te creó y serás fiel a tu propio ser. Depender de Él nos libera de las esclavitudes y nos lleva a reconocer nuestra propia dignidad».

Con información de la Archidiócesis de Sevilla.