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Nursia (Viernes, 15-02-2019, Gaudium Press) El pasado 10 de febrero, fiesta de Santa Escolástica, las religiosas benedictinas de San Antonio regresaron a la ciudad de Nursia, Italia, de donde tuvieron que trasladarse tras el grave terremoto del 30 de octubre de 2016. Durante el timepo posterior a la catástrofe, las monjas tuvieron que refugiarse en el convento de las Hermanas de Santa Lucía de la ciudad de Trevi.
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| Religiosas benedictinas de San Antonio junto al Arzobispo de Spoleto-Norcia. Foto: Vatican News. |
Para que las religiosa pudieran regresar se adaptó una residencia temporal en el Jardín de Santa Pace con habitaciones, espacios para reuniones , oficinas, cocina, comedor y sala, además de una capilla que es el centro de la comunidad y que alberga el Sagrario del antiguo monasterio. La entrada del convento temporal anuncia «Pax. Comunidad Benedictina de San Antonio. Bienvenido».
«Siempre debemos comenzar de nuevo con vigor», predicó el Arzobispo de Spoleto-Norcia, Mons. Renato Boccardo, durante una Eucaristía celebrada especialmente para celebrar el retorno de las religiosas. «Es necesario echar nuestras redes en Norcia y comenzar de nuevo desde aquí. Y las monjas benedictinas nos dicen que esto es posible». Para el prelado, la llegada de las monjas benedictinas «es una hermosa señal que nos hace mirar hacia adelante con confianza».
La Madre Caterina Corona, superiora de la comunidad, introdujo al monasterio temporal una reliquia de Santa Escolástica durante la procesión realizada después de la Eucaristía. La religiosa agradeció al Arzobispo y a las religiosas de Trevi que las acogieron tras el desastre. «Hemos regresado principalmente por ustedes, queridos conciudadanos de Nursia, para orar por ustedes y compartir este momento de inseguridad», expresó.
Con información de Vatican News.
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