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Montemorelos – Nuevo León (Miércoles, 27-03-2019, Gaudium Press) México es un país de fe, pero también de creatividad en torno a la fe. Esto se ejemplifica en el municipio de Montemorelos, Estado de Nuevo León, donde fue esculpida en madera una imagen de Jesucristo de grandes proporciones.
Se trata del «Cristo Gigante», obra del escultor mexicano Humberto Santiesteban Uviña, quien en el año 2003, con el apoyo de su familia, se aventuró a realizar la imagen de Jesús tallada en madera que probablemente es la más grande del mundo. Un trabajo que culminó en el 2015.
La inmensa escultura, que es un Cristo yacente que recuerda la Pasión de Nuestro Señor, mide casi 12 metros de altura y pesa tres toneladas. Para elaborarla, el artista utilizó madera de sabino y oyamel, que fue moldeanda hasta lograr la gran imagen de Jesús. Para los dientes se empleó hueso, y en las uñas se tallaron a los 12 apóstoles, también en madera.
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| La inmensa escultura, que es un Cristo yacente, mide casi 12 metros de altura y pesa tres toneladas / Foto: Facebook – Cristo Gigante de Montemorelos. |
Pero la tarea más difícil fue ensamblar la imagen, ya que se construyó realizando 24 piezas sueltas. Además el cuerpo yacente de Jesús cuenta con muchos detalles, entre ellas sus heridas, las espinas y las lágrimas, que son de cristal, y se aprecian de manera dramática.
Santiesteban, narró en una entrevista cómo fue que logró realizar la monumental obra: «Desde niño yo dibujaba, me gustaba el dibujo. Para hacer el Cristo fue un sueño que tuve en el 2003. Fueron 11 años de trabajo. En ese tiempo no sabíamos si íbamos a terminar o no, porque había ocasiones que no teníamos material, ni ánimos. Tirábamos la toalla, pasaban 6, 7 meses, y volvíamos a platicarlo y decíamos: ¡Cómo es posible tirar tantos años de tiempo, de trabajo, de dinero! Fue un sacrificio muy grande el que se hizo, pero gracias a Dios en el 2015 lo terminamos».
El escultor no duda en afirmar que el gran Cristo «puede ser un candidato a sacer un record Guinness como el Cristo de madera más grande del mundo».
También señaló que nunca es tarde para soñar y descubrir cosas nuevas: «Puede uno dedicarse 40, 50 años a un oficio, pero de repente encentra uno algo nuevo; y aunque tenga uno 50, 60, 70 años si descubre uno eso, puede uno cambiar. Por ejemplo, en mi caso, descubrí esto, y he estado haciendo mi propia obra, dibujos, pinturas y esculturas con mi propio estilo. Me he sentido muy satisfecho con lo que estoy haciendo».
Para dar a conocer esta inmensa obra, la familia Santiesteban acondicionó una bodega como museo. Allí cientos de personas, algunos por curiosidad, otros por fe, llegan para ver la imagen monumental, así como otras obras de arte sacro elaboradas por Humberto.
«Es impresionante. Mucha gente se impresiona, mucha gente ha llorado debido a la impresión que les da la escultura, sus magnitudes», señaló Humberto Jr. Santiesteban, en entrevista con Univisión.
«Este es un ejemplo de consistencia, de lo que se puede hacer aun teniendo pocos recursos, cuando se tiene bien definido el objetivo de lo que se quiere hacer», comentó Gilberto de la Fuente, uno de los visitante, quien fue también entrevistado por Univisión.
Con información de Aciprensa y Cristo Gigante de Montemorelos.
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