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Ottawa – Canadá (Jueves, 09-05-2019, Gaudium Press) Asia Bibi, una madre de familia cristiana de Pakistán que tras de ser acusada de «blasfemar contra Mahoma», ser apresada y condenada a muerte, fue finalmente liberada luego de ocho largos y terribles años en los que aguardó el cumplimiento de la injusta sentencia.
Asia Bibi dejó Pakistán y llegó a Canadá el martes 7 de mayo. En este país se ha encontrado con sus hijos y esposo, según informaron diversas fuentes que también aseguraron que su estado de salud es muy delicado, necesitando de tratamiento y cuidados médicos.
La noticia de ese «gran día» fue confirmada por su abogado Saif Ul Malook: «Asia Bibi llegó a Canadá ayer de noche. Dejó Pakistán con el marido, después que el gobierno permitió que saliesen del país. Llevó tiempo, pero está finalmente en seguridad gracias a Dios».
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Saif Ul Malook informó también que el asilo concedido por Canadá es el resultado de la acción de activistas religiosos, diplomáticos y organizaciones católicas que lucharon por la «libertad de Asia Bibi» durante todos estos años de «tiempos difíciles» para ella y para su familia.
Radicales islámicos
En enero de este año el Supremo Tribunal de Pakistán había rechazado un recurso contra su propia decisión de absolver a la cristiana de las acusaciones de blasfemia, por las cuales había sido condenada a muerte.
La decisión fue contestada por grupos radicales islámicos, que exigían la ejecución de la mujer, absuelta al final de octubre de 2018, después de ocho años en la prisión.
Asia es madre de cinco hijos, estuvo presa después de haber sido condenada a la muerte por blasfemia en 2010.
Al final de octubre de 2018, el Supremo Tribunal de Justicia de Pakistán la declaró inocente de todas las acusaciones, pero ella continuaba presa.
Asia Bibi y su marido estuvieron bajo protección gubernamental, en un lugar desconocido.
El caso de Asia Bibi
En junio de 2009, Asia Bibi trabajaba recogiendo frutas en la ciudad de Sheikhupura, cerca de la capital Lahore, en Pakistán. Cuando se aproximó a un pozo para beber, un grupo de musulmanes la acusó de contaminar el agua por ser cristiana.
La respuesta de Bibi a los insultos hechos contra su Fe fue inmediata:
«Yo creo en mi religión y en Jesucristo que murió en la Cruz por los pecados de la humanidad. ¿Qué hizo su profeta Mahoma para salvar la humanidad?».
Entonces, ella fue acusada de proferir blasfemia contra el Islam, Bibi fue presa en 2009 y condenada a muerte en 2010.
Comenzó, entonces, una campaña internacional para conseguir su liberación. El 31 de octubre de 2018, la Suprema Corte Federal anuló la sentencia que pesaba sobre esa madre católica.
La dura ley anti blasfemia paquistaní fue establecida en la época colonial británica para evitar enfrentamientos religiosos, pero en la década de 1980, varias reformas promovidas por el dictador Zia ul Haq favorecieron el abuso de esta ley. Desde entonces ocurrieron más de mil acusaciones de blasfemia, un crimen que puede llevar a la pena de muerte, aunque esa condenación nunca haya sido cumplida.
(JSG)
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