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Chile – Santiago (Jueves, 16-05-2019, Gaudium Press) La Arquidiócesis de Santiago (Chile), inauguró el último domingo 12 de mayo, la primera Capilla de Adoración Perpetua del país localizada en el interior de un centro de salud: el Hospital Sotero del Río, que atiende alrededor de un millón y medio de personas por año con enfermedades y tratamientos de alta complejidad.
La ceremonia inició con una Santa Misa presidida por el Arzobispo de Santiago, Mons. Celestino Aós; y concelebrada por el Padre Simone Gulmini, de la Fraternidad Sacerdotal de los misioneros de San Carlos de Borromeu, y otros sacerdotes.
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En su homilía, Mons. Aós afirmó a los profesionales de la salud: «Benditos ustedes que con su contribución hacen posible que los hombres y las mujeres que llegan aquí puedan encontrar la salud o, por lo menos, el alivio a sus males».
Respondiendo la indagación ‘¿de qué sirve rezar cuando hay enfermos en las camas que están sufriendo?’, el prelado explicó que esa «es la pregunta más idiota que se puede hacer, pues hay cosas que no pueden juzgarse a partir del utilitarismo: ‘de qué sirve’. ¡A nivel humano de nada sirve, pero en la práctica, funciona!». Y concluyó diciendo que «todo lo que nos distancia de la oración viene del diablo, porque él teme la oración».
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Después de la Celebración Eucarística, el prelado condujo la custodia con el Santísimo Sacramento hasta la capilla localizada en el segundo piso del hospital. «En este lugar, adoremos a Cristo en la Santa Hostia, pero que sea para que, en verdad, después sepamos descubrir a Jesucristo en el compañero que trabaja a nuestro lado, en el enfermo, en la visita que viene», afirmó Mons. Aós.
De acuerdo con el Arzobispo de Santiago, el sentido de la adoración «no es para suscitar simplemente unos sentimientos piadosos, emotivos, sino para enraizarnos en la Fe en Jesús, que nos dice: anda y haz tú lo mismo, ama a los demás».
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«La medicina debe atender a todas las personas, y dentro de cada persona están necesidades espirituales. Esta iniciativa nos ayuda a formar mejor a nuestros alumnos y médicos, para que en el futuro consideren siempre la espiritualidad en el centro de su atención», aseguró el vice-decano de la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile, doctor Jaime Godoy.
Adoradores de cuatro Parroquias del Vicariato de Maipo, del movimiento y del propio hospital se responsabilizarán en mantener la vigilia en turnos que comenzarán a la medianoche y seguirán por la madrugada. Hasta el momento alrededor de 300 personas ya se comprometieron a participar de la adoración permanente. (EPC).
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