Ciudad del Vaticano (Jueves, 06-06-2019, Gaudium Press) La Pontificia Academia para la Vida anunció el pasado miércoles su tristeza por el fallecimiento del Cardenal Elio Sgreccia, Presidente emérito de dicha Academia y recordado por sus aportes notables en el campo de la bioética. El Cardenal fue atendido en el Hospital Policlínico Gemelli, pero pidió ser llevado a su casa ante la proximidad de su muerte. Según la Academia, «murió en paz el miércoles 5 de junio de 2019 a las 12:15 p.m».
Cardenal Elio Sgreccia, Presidente emérito de la Pontificia Academia para la Vida. Foto: Sala de Prensa de la Santa Sede. |
El Papa Francisco comunicó a los familiares del purpurado sus condolencias y destacó el testimonio del Cardenal en un telegrama divulgado por la Oficina de Prensa de la Santa Sede. «Recuerdo con ánimo grato su gran servicio a la iglesia, especialmente la obra preciosa y solerte en defensa de los valores fundamentales de la vida humana, por acción de estudio capilar, por formación y evangelización».
«Desde el establecimiento de la Academia Pontificia el 11 de febrero de 1994, el Cardenal Sgreccia ha sido el protagonista y el corazón valiente y sabio de nuestra institución, apoyando y promoviendo el estudio, la promoción y la protección de la vida humana en medio de muchos desafíos planteados por los recientes avances en tecnología y medicina», recordó la Academia en el comunicado oficial que informó al mundo sobre su fallecimiento.
La Academia agradeció el permanente trabajo del Cardenal y su seguimiento de las actividades de la institución, así como sus contribuciones «a las discusiones científicas y académicas en nombre del Magisterio de la Iglesia». En palabras de su sobrina, Palma Sgreccia, el purpurado fue «»un hombre de fe, caracterizado por una gran moderación en el estilo de vida, que siempre trató de promover el bien de todos». La profesora destacó que el Card. Sgreccia «fue guiado por la luz de la fe y la fuerza de la razón en cada elección y decisión».
Con información de Academia Pontificia para la Vida.
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