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Padua (Jueves, 13-06-2019, Gaudium Press) Los fieles de Padua, de diversos puntos de Italia y del mundo se han congregado este 13 de junio en torno a la fiesta de su patrono: San Antonio.
Los homenajes comenzaron días atrás con la tradicional Tredicina al santo, oración preparatoria a su fiesta que tiene lugar los trece días previos a la solemnidad. La oración se ha desarrollado cada día en la Basílica de San Antonio de Padua, en la ciudad italiana.
Momento importante se vivió al entrar la noche de este miércoles 12 de junio en Camposampiero, con la vigilia que recordó el Tránsito de San Antonio. En la ocasión se evocó la víspera de la muerte del santo cuando sintiéndose enfermo y próximo a su muerte, pidió ser llevado de Camposampiero hasta el convento de ‘Maria Mater Domini’ en Padua. La jornada culminó con el concierto de campanas en toda la ciudad que se realiza cada año en la víspera de la solemnidad del santo con la colaboración de las parroquias de Padua.
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| Cientos de fieles participan en las celebraciones de San Antonio de Padua / Foto: FB-Pontificia Basilica di Sant’Antonio di Padova. |
Ya el jueves 13 de junio, en la fiesta del «santo de los milagros», la Pontificia Basílica de San Antonio de Padua acogió varias celebraciones Eucarísticas, así como a miles de fieles procedentes de varios puntos de la ciudad, de Italia y del mundo.
La Misa solemne de la fiesta ha tenido lugar a las 11:00 horas, siendo presidida por el Obispo de Padua, Mons. Claudio Cipolla, quien al comenzar la homilía, expresó:
«Cada vez que nos encontramos en esta celebración (…) podemos sentirnos conmovidos al ver cuánta fe el Señor ha dado, sobre todo a las personas pobres, aquellos que tienen problemas, que tienen sufrimientos en el corazón, que llevan consigo los sufrimientos de otros, sobre todo de los hijos, de las personas que se quiere».
Siguiendo esta línea, el prelado añadió: «Ver cuánta fe se testimonia en cada uno, es verdaderamente una cosa que toca el corazón y, pienso, toca también el corazón del Señor».
En otro momento, Mons. Cipolla destacó la fiesta de San Antonio de Padua y su cercanía, en esta oportunidad, con Pentecostés y la solemnidad de María, Madre de la Iglesia:
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| Es tradición que en esta fiesta los devotos reciban el «Pan de San Antonio» / Foto: FB-Pontificia Basilica di Sant’Antonio di Padova. |
«Después de la solemnidad de María, Madre de la Iglesia, a quien nos confiamos también hoy, celebramos, el 13 de junio, la fiesta de nuestro santo. Es el Espíritu del Señor que nos convoca para celebrar esta fiesta de San Antonio».
En otro momento se refirió a todos los fieles presentes en la conmemoración: «Venimos de las parroquias de la ciudad y de todo el territorio de la diócesis. Están presentes también presbíteros y diáconos, entre ellos muchos son de la iglesia diocesana (…) Es un signo claro del profundo vínculo que nos une al santo».
Recordó, igualmente, que la devoción al Santo Paduano «es antigua, profunda». Y señaló que «la Iglesia de Padua es la iglesia de San Antonio». «Por eso agradecemos la generosidad, la hospitalidad de los hermanos», expresó luego haciendo referencia a los frailes Franciscanos, custodios de la Basílica de San Antonio de Padua.
Durante la jornada cientos de fieles se acercaron a la tumba de San Antonio para expresar al santo su acción de gracias por los favores recibidos y confiar a él interceda ante Dios por sus peticiones.
Con información de Pontificia Basílica de San Antonio de Padua.
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