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Coutances (Miércoles, 19-06-2019, Gaudium Press) Otras dos iglesias, en el norte de Francia, fueron vandalizadas a mediados de mayo. Se trata de la iglesia de Créances y de la iglesia de Pirou, pequeñas poblaciones con características rurales, dependientes de la diócesis de Coutances.
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| Iglesia de Créances |
En Créances, puerta de sacristía destrozada, armarios registrados y revolcados. Un tabernáculo -por fortuna vacío- forzado. En Pirou, cerca de Créances, ataque más grave: La propia puerta de entrada de la iglesia, de fuerte roble, fue violentada a golpes de mazo. Cuando el parroquiano encargado de la apertura de las puertas de la iglesia entró, vio «el tabernáculo fracturado, el copón volcado», las hostias por el suelo. Él, Christian Legueurlier, no se deja impresionar fácilmente, combatió en Argelia. Pero el ver la violencia con la que se atacó el sagrario con una pata de cabra, contemplar el ciborio y hostias por el suelo, lo conmovió: «No olvidaré nunca esta visión que tuve entrando…». Las comunidades cristianas de esas dos iglesias están unidas, pero están chocadas.
La policía cree que se trata de simples ladrones, entretanto las dudas surgen.
Una comisión parlamentaria de inquérito
Philippe Gosselin, diputado de la circunscripción de Saint-Lô, cercana a las iglesias vandalizadas, estuvo en las iglesias. Junto con una colega, Annie Genevard, diputada de Doubs, están promoviendo la creación de una comisión parlamentaria que investigue los actos anticristianos.
«Queremos hablar de ello, queremos estadísticas, tipologías, mapas. Esto no es una instrumentalización: es precisamente para evitar fantasías sobre este tema, dice Gosselin. Estos hechos ya no son sólo exclusivos de iglesias de los centros de las grandes ciudades, ahora se llevan a cabo en pueblos pequeños. Algo está sucediendo, y queremos arrojar luz sobre ello».
La misión parlamentaria también podrá indagar a autoridades como el ministro del Interior, sobre qué políticas se están siguiendo al respecto. Gosselin asegura que no se contentará con comunicados del ministerio lamentando los hechos, como ocurrió en febrero pasado: «Que se nos deje hacer nuestro trabajo: él es particularmente evaluar las políticas públicas y controlar la acción del gobierno. Hay un tema con los actos anticristianos».
Con información de Famille Chrétienne
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