Leicester (Miércoles, 26-06-2019, Gaudium Press) La Abadía de Monte San Bernardo en las afueras de Coalville, North West Leicestershire, Inglaterra, es la protagonista de un nuevo documental que será presentado en el circuito de festivales de cine de 2019. La cinta lleva por título «Outside the City» (Fuera de la Ciudad) y representa una oportunidad excepcional de apreciar la vida de silencio y oración en el único monasterio cisterciense del país.
Trailer del documental Outside the City. Imágenes: Intrepid Media. |
«En el corazón de las cosas, lo que más me interesa es la espiritualidad. Ese es el tema central de mi trabajo, y este es un lugar de profunda espiritualidad», indicó a Crux el cineasta independiente Nick Hamer, autor del documental. A pesar de no profesar la fe católica, Hamer se sintió atraído hacia el testimonio de los religiosos que entregan su vida en silencio y trabajo y decidió que la sencilla vida de la comunidad sería un tema de gran interés para un documental.
Como hilo conductor de la narrativa, la cinta relata el proceso de transición de las labores de agricultura a la elaboración de cerveza como sostenimiento de la Abadía. Pero el fondo del documental es expresar el papel de la vida religiosa contemplativa en el mundo de hoy. «Aunque hemos filmado aquí varias veces a lo largo de los años, esto fue bastante diferente», relató el Prior del monasterio, P. Joseph. «La filmación anterior se concentraba solo en uno o dos días y fue cuidadosamente coreografiada, pero a Nick se le dio acceso sin precedentes al monasterio y a la comunidad durante un período de tres años».
Para poder comunicar la experiencia de vida de los monjes, Hamer se aventuró a vivir toda una semana siguiendo las reglas del monasterio. Como no es católico, los monjes le proporcionaron una lista de lecturas sobre la espiritualidad cisterciense como preparación a su experiencia. «La mayor parte de su filmación se realizó solo con él, sin un equipo, por lo que siempre fue discreto y no interfirió con nuestra vida», indicó el Prior.
Cuando comenzó las filmaciones, los monjes se encontraban ante la disyuntiva de iniciar la producción de cerveza ante varios desafíos materiales, por lo cual el tema inicial era claro para el documentalista. Sin embargo, pronto se dio cuenta que el tema verdadero serían los monjes, algunos de los cuales fallecieron de edad avanzada durante el tiempo de filmación. El documentalista descubrió que, al alejarse de la ciudad y de sus distracciones, los monjes encuentran que las cosas que los separan de Dios también están, en niveles más profundos, en su propio corazón, por lo cual la vida contemplativa requiere un paciente trabajo adicional por parte de los religiosos.
El cineasta se sorprendió por la humildad con la cual los monjes enfrentan la reducción de su número. «Parte de la actitud de muchos monjes es que la Orden no es sagrada (por sí misma), su Orden es su forma de vida, [y] si sucediera que Dios decidiera que esta Orden ya no es necesaria, no importaría», relató Hamer a Crux. «No creen que los monjes cistercienses sean esenciales para la vida cristiana. Es su vocación (…). Sin embargo, son responsables por su comunidad, y son responsables de administrar lo que se les ha dado».
Con información de Crux.
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