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Fátima – Portugal (Jueves, 01-08-2019, Gaudium Press) El Vice-rector del Santuario de Fátima, que presidió en la mañana del domingo, 28 de julio, la misa dominical en el Recinto de Oración, afirmó que pedir es señal de «confianza» y no de «humillación» y, por eso, la misma actitud que adoptamos con Dios, en una oración de súplica, debemos también adoptar en relación a los otros.
No tener miedo de pedir
«No tengamos miedo de pedir; pedir es señal de confianza. No queremos ser como superhéroes que se bastan a sí mismos; al pedir estamos diciendo que otros son importantes en nuestra vida» afirmó el Padre Vítor Coutinho, «y eso nos da esperanza».
A partir de la liturgia de este domingo, que valora la oración, sea de súplica o de acción de gracias, como la expresión de la proximidad, del diálogo y de la confianza en Dios, el sacerdote recordó que «la Escritura nos muestra que pedir no es una actitud menor del ser humano, no rebaja ni es señal de debilidad; quien pide es porque confía.»
«Pedimos cuando estamos seguros de que el otro no nos humilla», enfatizó.
Traer todo delante del Señor
El Vice-rector del Santuario subrayó, además, que «delante del Señor podemos traer todo lo que nos ocupa y preocupa, todos los miedos y deseos».
«A Dios podemos pedir sin miedo» porque «Dios escucha, no es inútil hablar con Él y pedirle, porque Dios se deja conmover; ¡no es indiferente!» y «¡nos toma en serio!».
«Esto nos da la certeza de que nunca estaremos solos ni seremos abandonados», prosiguió recordando que Dios «está al lado de todos, en especial de las víctimas del sufrimiento, de la pobreza y de las injusticias, porque Dios nos toma en serio, asumiendo nuestras angustias y nuestros sufrimientos, aunque no siempre nos parezca que es en la medida en que pedimos». (JSG)
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