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Minneapolis (Jueves, 08-08-2019, Gaudium Press) Durante la Suprema Convención de los Caballeros de Colón en Minneapolis, Estados Unidos, esta organización fraterna otorgó de manera póstuma la medalla Cáritas a Kendrick Castillo, un joven católico de 18 años que fue asesinado en el mes de mayo mientras intentaba desarmar a un atacante que pretendía realizar una masacre en su escuela. Gracias a su sacrificio, el atentado pudo ser frustrado sin que hubieran más víctimas.
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| La familia de Kendrick Castillo recibe en su nombre el Premio Cáritas en presencia del Arzobispo de Baltimore, Mons William Lori, y el Caballero Supremo Carl Anderson. Foto: KoC. |
«Mientras atravesamos la vida, simplemente recuerden: sean como Kendrick, sean desinteresados en sí mismos», comentó John Castillo, padre del joven galardonado al recibir el premio en su nombre, según informó CNA. «Me gustaría poder decir que le enseñé esas cosas a Kendrick. Hay algunas cosas que le enseñé. Pero en realidad, él fue el ángel que me salvó la vida, que me enseñó a vivir. Nunca lo olvidaré».
El día 07 de mayo, mientras asistía a su escuela preparatoria en Highlands Ranch, Colorado, un estudiante armado con un rifle ingresó a su salón de clases para dar inicio a lo que sería una masacre. Tan pronto lo vio, Kendrick se puso de pie y se abalanzó sobre el agresor y lo empujó contra una pared. Dos estudiantes más se unieron para desarmarlo, pero Kendrick recibió un disparo en el pecho que puso fin a su vida. Esta acción mereció el segundo reconocimiento más importante de la organización fraterna con más de 1.9 millones de miembros en todo el mundo.
La memoria de Castillo fue destacada por el Arzobispo de Toronto, Canadá, Cardenal Christopher Collins de Toronto, quien lo puso como ejemplo de amor sacrificado. «Es a través de las personas que Dios nos habla, a través de su virtud. A veces llevados a un momento heroico, a veces día a día», comentó durante su intervención en la Cena de los Estados Unidos. «Y eso nos inspira, nos guía, nos muestra el camino. Y es por eso que la Iglesia toma tiempo, esfuerzo y atención para mostrar el ejemplo de las personas santas, las personas que nos muestran el camino, el llamado a Dios, nos ayudan en nuestro viaje».
La medalla Cáritas está acuñada con la imagen del Buen Pastor y fue creada en 2013 para » econocer a aquellos que abrazan más profundamente los principios de caridad de nuestra orden en su servicio y su sacrificio por los demás», según expuso el Caballero Supremo, Carl Anderson. «Kendrick Castillo vivió y murió por este principio. Hay quienes dicen que ya no tenemos héroes. El receptor de esta noche de nuestro Premio Cáritas demuestra que sí tenemos héroes».
Castillo es recordado por su amabilidad, por la recepción cálida a los feligreses de la parroquia en la que servía y por su intención de hacer parte de los Caballeros de Colón en un futuro para dar continuidad a su testimonio de fe y su interés por el bienestar de los demás.
Con información de Catholic World Report.
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