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Asmara (Jueves, 19-09-2019, Gaudium Press) Los Obispos católicos de Eritrea redactaron el pasado 04 de septiembre una carta de protesta al Ministro de Educación del país, Semere Re’esom, por la expropiación de cuatro escuelas católicas. La polémica acción gubernamental ocurre después de una expropiación similar de las instituciones de salud administradas por la Iglesia en lo que ha sido identificado como un intento por limitar la acción de la Iglesia fuera de los actos de culto.
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| La Iglesia denunció las expropiaciones como un acto de «odio a la Fe», el mismo término empleada para calificar la intencionalidad de los martirios. Foto: Eparquía Católica de Keren. |
«Si esto no es odio a la fe y a la religión entonces, ¿qué más puede ser?», cuestionaron los prelados al funcionario. «Las acciones que están siendo tomadas contra nuestras instituciones de salud y educación son contrarias a los derechos y la libertad legítima de la Iglesia». Los Obispos reclamaron que si el estado tiene alguna queja sobre la manera como se llevan a cabo las tareas de servicio por parte de los religiosos las presente de manera adecuada.
«Si hubieran situaciones que necesiten ser corregidas o ajustadas, no sólo es bueno, sino incluso también es el único camino viable que esto tenga lugar en el contexto de un diálogo abierto y constructivo», propusieron los Obispos. En el caso de las instituciones de salud, las autoridades civiles sólo se justificaron, según informó un sacerdote a EWTN, en la suposición de que dichas instituciones serían «innecesarias» por existir los centros de atención en salud estatales.
La situación de derechos humanos en Eritrea ha sido frecuente fuente de alertas por parte de organismos internacionales. El país es administrado por un partido político único y la Iglesia ha tenido controversias con las autoridades por la falta de acciones para prevenir la emigración de los habitantes y los llamados de los Obispos a la reconciliación nacional.
Con información de Catholic Herald.
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