Menú 
Filadelfia (Sábado, 21-09-2019, Gaudium Press) El Arzobispo de Filadelfia, Estados Unidos, Mons. Charles Chaput, dedicó un reciente artículo en el informativo diocesano Catholic Philly para abordar la polémica sobre las enseñanzas del P. James Martin, un conocido predicador católico que aborda temáticas como la sexualidad y la identidad de género y que según alertó el prelado, «no habla con autoridad en nombre de la Iglesia». La advertencia del Arzobispo fue replicada por el Obispo de Springfield, Mons. Thomas John Paprocki, y el Obispo de Knoxville, Mons. Rick Stika.
 |
| Mons. Charles Chaput, Arzobispo de Filadelfia, Estados Unidos. Foto: City of Philadelphia / Kait Privitera. |
Mons. Chaput expuso que el sacerdote fue citado por la Universidad de St. Joseph en Filadelfia para exponer sus tesis, lo cual generó reclamos por parte de los fieles. El prelado recordó que muchas universidades católicas no dependen directamente del Obispo, por lo cual generalmente el prelado no puede vetar un acto académico de esta naturaleza. Sin embargo, sí advirtió a los fieles sobre «la confusión causada por sus declaraciones y actividades».
Causa de confusión
«El padre Martin sugiere que las personas atraídas por personas del mismo sexo y las personas con disforia de género se etiqueten de acuerdo con su atracción y disforia», enunció el Arzobispo, quien recordó que «aunque la Iglesia sí enseña que el cuerpo es parte integral de la identidad humana, nuestros apetitos sexuales no definen quiénes somos». Mons. Chaput también advirtió sobre las objeciones del sacerdote a enseñanzas incluidas en el Catecismo de la Iglesia Católica, «pero aquí el padre Martin tergiversa la creencia católica». El Arzobispo recordó que la Iglesia no condena a la persona «como si todo lo relacionado con ellas fuera desordenado o moralmente defectuoso» sino que advierte en contra de una inclinación particular «que no está ordenada hacia el cumplimiento de los fines naturales de la sexualidad humana».
De igual manera, Mons Chaput denunció que el predicador se relaciona con organizaciones «que se oponen o ignoran las enseñanzas de la Iglesia, y respalda eventos, como el mes PRIDE, que causan confusión para los fieles». Además, las expresiones ambiguas del predicador pueden llevar a los fieles a pensar que la doctrina moral de la Iglesia careciera de autoridad vinculante. «Las verdades incompletas, de hecho, presentan un desafío a la creencia católica fiel», alertó el Arzobispo.
Otros Obispos se suman a las advertencias
Por su parte, Mons. Paprocki afirmó a este respecto que «el Arzobispo Chaput ha brindado una advertencia útil a los católicos sobre el padre James Martin» y reafirma que «los mensajes públicos del padre Martin crean confusión entre los fieles e interrumpen la unidad de la Iglesia al promover una falsa sensación de que el comportamiento sexual inmoral es aceptable bajo la ley de Dios». El acercamiento del sacerdote a las personas con tendencias desordenadas no es criticado por el Obispo, quien afirmó que en este aspecto «expresa correctamente el amor de Dios por todas las personas», pero criticó la falta de advertencias necesarias en ese ministerio.
«La misión de la Iglesia con estos hermanos y hermanas es la misma que para todos sus fieles: guiarnos, alentarnos y apoyarnos a cada uno de nosotros en la lucha cristiana por la virtud, la santificación y la pureza», indicó el Obispo de Springfield. «Este asunto no es de opinión, es la enseñanza de nuestro propio Señor, como escuchamos en el Evangelio de Lucas: ‘Presten atención a ustedes mismos; si tu hermano peca, repréndelo, y si se arrepiente, perdónalo'».
Mons. Stika se refirió a la publicación de Mons. Chaput a través de sus redes sociales, y elogió el texto explicando que en dicha columna de opinión el prelado «elogia su alcance pero desafía sus pensamientos morales y teológicos. También afirma claramente que este es un gran error». El Obispo de Knoxville comentó su propio parecer en la materia: «Yo agregaría el dolor que causa al inducir a las personas al sufrimiento, ya que esto moralmente nunca puede ser aceptado por la Iglesia».
Con información de Catholic Philly y Diócesis de Springfield.
Deje su Comentario